miércoles, mayo 28, 2008

LOLA INCOMPRENDIDA

-Pepeeeeeeeeeeeeeeeeeeee…
-¿Qué eeeeeeeeeeeeeeeee?, ¿se puede saber por qué chillas?
-Estoy probando mi capacidad torácica… Y tú, ¿por qué me chillas?
-Yo no te he chillado, Lola.
-¿Cómo que no me has chillado? Mis tímpanos han tintineado.
-Porque te habrás limpiado hoy los oídos y los tienes despejados.
-Pepe, ¿acaso me estás insinuando que oooooootros días no me lavo?
-No insinúo nada, es una forma de decir, Lola, que contigo hay que medir las palabras.
-Es verdad, Pepe, no has insinuado, has afirmado. Me has llamado guarra.
-¿Que te he llamado qué?
-cochina, puerca, mugrienta, cerda, sucia, asquerosa, chancha…, y más cosas que habrás pensado y no has dicho… de momento.
-Lola, yo no he dicho nada de eso; no veas donde no hay.
-Veo muy bien y entiendo mejor. Tú has dicho…
-Que no he dicho, Lola. No te empecines.
-¿Empecines, dices? Del verbo empecinarse que significa obstinarse, aferrarse, encapricharse, terco, pertinaz… ¿Con qué me quedo, Pepe?
-Terca, Lola, terca como una mula.
-¿Mula?, ¿mula, dices, Pepe? Me has llamado mu uuuuuuuuuuula, Pepe.
-Sí, Lola, te he llamado mu uuuuuula.
-Pepe…
-Dime, Lola.
- En mi diccionario viene que una mula es: “Animal resultante del cruce del caballo y el asno, de mayor tamaño que este, utilizado generalmente como bestia de carga por su gran fuerza y resistencia”… Desde luego, Pepe, soy una bestia de carga y mi resistencia para que no me comas la moral es infinita.
-¿Que yo te como qué? Tú sí que me comes, Lola, la cuenta corriente, la paciencia. To ooooooodo, Lola, me comes todo.
-Anda, éste..., me gusta comer, es uno de los placeres de la vida. Ahora bien: tu paciencia es incomestible, Pepe.
-¿Qué la pasa a mi paciencia, Lola?
-Mejor dicho, Pepe, qué no la pasa. Si no existe no es, por tanto, no se halla. En fin…, como íbamos diciendo, mula, también significa persona muy bruta… ¿Qué opinas, Pepito?
-Eso..., y no me llames Pepito. Y mi paciencia, Lola, existe, porque si no existiera, yo no estaba aquí.
-No te me amontones, Pepe, vamos por partes. ¿Qué es “eso”? En cuanto a lo de tu paciencia, nadie te obliga a estar aquí, si estás es porque soy irresistible siendo animal de carga o bruta como un asno… Divina, Pepe, soy divina, pero tu subconsciente me niega como San Pedro a Cristo… Tienes un severo problema, Pepe. Digo yo, ¿no tendrás una doble personalidad y no te has enterado, querido Pepe?
-Lola, no te aguanto.
-Sí, Pepe, me aguantas. Lo que pasa es que te molesta que sea superior a ti.
-Superior, ¿en qué?
-Y yo qué sé, Pepe. Pero no hay duda que te puedo y si te puedo es que soy grande… Ah, y no de carnes, ¿eh? Soy grande de espíritu, tolerante con mi prójimo. Abierta a las nuevas tecnologías, colosal parlante… Ahora, ¿tú qué eres, Pepe? Dime…
-No quiero ser nada, Lola… Me has puesto dolor de cabeza. ¿Te puedo pedir un favor, Lola?
-Por supuesto, Pepe, sabes que soy magnánima. Aunque no exista entendimiento entre nosotros, soy buena gente que ama a su prójimo.
-Pues, Lola, ámame y cállate un rato…
-Ah, no, Pepe…, antes muerta que callada. Yo no cierro el pico.
-Lola…
-Dime, Pepe.
-Muérete un rato.
-Pepe, ¿hay garantía de resucitamiento?

6 comentarios:

Cristina dijo...

mE ESTRESSA ESTE MATRIMONIO!!!!

Muy buen final!!!

Saludos

Cristina

CATI COBAS dijo...

Los diálogos: desopilantes y las imágenes: muy buenas...Cariños. Yo

Nómada planetario dijo...

Eso si que es un relación de amor-odio sin desperdicio, como aquellas letras de Pimpinela pero con infinita más frescura.
Buen finde. Bresos desde un encadenado a libos de texto infumables.

PIER dijo...

JO! POBRE PEPE.. JAJAJA..
Me cae hasta bien el tio..
oye lola... que risas.. madre mia! escenas de matrimonio se quedo corta..
que tengas un buen domingo.. abrazos.

Unknown dijo...

Nada de pobre Pepe, si acaso pobre Lola. La culpa del stres de Lola es Pepe, y además escuatro, por lo menos.
Vaya fotica!!!
Besos.

Marinel dijo...

Desde luego pobre Pepe,jajaja.Pero eso es el matrimonio amor entreverado, como digo yo.La Lola tiene mucho carácter y Pepe mucha paciencia, que sumada al amor que se profesan, pues todo queda en arrebatos chillones.
Muy divertido, sí señora.
Más besos.