domingo, noviembre 02, 2008

NUEVO BLOG...

BUENOS DÍAS, AMIGOS DE UNA SONRISA.
HE ABIERTO UN NUEVO BLOG YA QUE ÉSTE ESTÁ TAN CARGADO QUE CUESTA ABRIRLO.
A PARTIR DE HOY, POR FAVOR, IROS A "ME LLAMO LOLA 2"
ALLÍ OS ESPERO A TODOS CON EL MEJOR ÁNIMO DE SONREÍR, SONREÍS SIEMPRE
¡GRACIAS!

martes, octubre 28, 2008

EL CUMPLEAÑOS DE MARI PILI

-Lola, por dios, entra en razón.
-No me da la gana, Mari Pili. La razón me sienta fatal.
-Lola para y respóndeme, ¿te has visto, te has mirado?
-Sí, claro y sabes que no veo, pero un pálpito me dice que estoy cañón.
-Así, de esa guisa, eres una bomba de relojería, Lola.
-¿Sí? Qué guay, me acabas de subir la autoestima, Mari Pili. Ahora, pruébatelo tú.
-Lola aterriza, ¿dónde vamos tú y yo con minifalda? Aún mis mulos pasan, arrugados, pero pasan, Pero es que los tuyos parecen dos jamones disecados.
-Haré como si no te he oído, Mari Pili. Yo, me pongo minifalda y tú, si quieres ir de abuela, vete, pero que sepas que cuando nos vean pasar y silben, no va por ti.
-A dios gracias, Lola…
-Revenida, más que revenida. Que sepas que hay que seguir la moda. Te subes al tranvía o te bajas y si te bajas ya sabes que no estás en la onda.
-Lola, la moda hay que seguirla con cautela.
-Por supuesto que sí, Mari Pili. Qué te crees que yo no me doy cuenta que lo que de verdad me sienta a mí bien no son las plumas al estilo Jean Harlow, pero es que este invierno no encuentro plumas, entonces me he de poner minifalda. Joven e inmortal, Mari Pili.
-¿Quién tú o la Jean Harlow?
-Yo. La otra pobre mujer se ha muerto. Venga, pruébate ésta…
-Que no, Lola, que no. Yo soy consecuente con mi edad.
-Ay, Mari Pili, no me llames incongruente, ay, que me deprimo… Oye, mona, ¿es que una mujer de mi edad no puede ponerse, acaso, minifalda?
-No. Y las gordas, tampoco.
-Pero, ¿qué te han hecho a ti las gordas, cacho esmirriada? No comprendo que te metas conmigo, pero con las pobres gordas, menos, Ya bastante tienen con sobrellevar su peso.
-Lola, la moda está para favorecer. Para estar más sexy, para hacerte más atractiva, joven…
-¿Y yo no estoy sexy, Mari Pili?
-Estás hecha un cristo, Lola. Vieja y ridícula.
-Ay, no me digas vieja, Buaaaa…
-No llores, mujer, te lo digo por tu bien.
-Sí, claro, el que te quiere bien, te hará llorar, ¿no? Buaaaaa…
-Venga, retiro lo dicho.
-Ah, no, no retiras nada. Lo dicho, dicho queda. Santa Rita, Rita, lo que se da, no se quita. Me has llamado vieja y pelleja.
-Pelleja, no te he dicho, Lola.
-… Pero lo digo yo, buaaaa… ¿No ves cómo se me está descolgando la cara? Buaaa…
-Sí, ya lo he visto desde hace tiempo.
-… Que has visto, ¿el qué, Mari Pili?
-Tu descabalamiento, Lola.
-Pero si no ves, Mari Pili. Encima no me vengas de asesora de imagen y, encima, ciega, leñe. No comprendes que la minifalda me hace olvidar que la cara se me descuelga.
-… Lola, ¿qué día es hoy?
-Veintiocho de octubre, año del sapo.
-Lola… hoy es…, no puedo ni pronunciarlo. Me hace daño al riñón.
-…Mari Pili, somos de la época de Jean Harlow…
-Se me acaba de descolgar hasta la moral.
-Ay, Mari Pili, qué feliz soy. Acabo de descubrir que no me quiero poner minifalda. Ya no me hace falta.
-¿No? ¿Por qué, Lola?
-Porque ya eres tan vieja y pelleja como yo… ¡FELIZ CUMPLEAÑOS, PILAR!
-Lola, soy Mari Pili, no Pilar…, un poquito de por favor. Ah, y no soy de la generación de Jean Harlow. Soy de la generación del sesenta y ocho.
-¿Eh? ¡Ah!, ya... Pues yo soy de la generación de la constitución... ¿En qué año fue eso?

-Lola, imposible. Yo soy más joven que tú.

-No, no... Vamos que no, que... ¿Y si decimos que nacimos cuando las últimas elecciones americanas, las de Obama... Hecho, voy ahora mismo a por la tarta y pongo sólo una vela. Encima no gastamos envelas, hay crisis.

-Oye Lola, ¿no estaremos un poco mal nacidas?

-¿Pero por qué?

-Hija, si tenemos un año, estamos un pelin deterioradas.

-Pero cuando nos pongamos minifalda ni se nota, Mari Pili. ¡Feliz cumpleaños!

-Y dale, no lo repitas, Lola, que se van a enterar los lectores que soy vieja y pelleja.

viernes, octubre 24, 2008

LOLA LA MOROSA

-Lola. Lola, Looooooooooooooola…
-Hum… Hasta mañana, pocholo.
-¡Lola despiértate!
-Voy, ya voy. Pareces Jesucristo Superzar resucitando a un pollo, Pepe.
-Abre los ojos, Lola.
-Lo que te digo, una versión casera del nuevo testamento. ¿Qué quieres?
-La hipoteca, Lola.
-La hipoteca… ¿Qué la pasa a la hipoteca, Pepe?
-Hoy es día veinte, Lola.
-Un momentito, Pepe, ¿qué hora es?
-La una treinta y cinco de la mañana.
-Entonces, es veintiuno, Pepe. Hasta mañana, Superzar.
-Lola levántate y anda.
-¿Segurito, Pepe, que no te has leído el salmo veintitrés de San Jeremías?
-No, ese salmo no existe.
-Pues estás aducido, desdoblamiento de personalidad. Te crees que eres Jesucristo Superzar, insisto.
-Lola no has pagado tu hipoteca.
-Eso en el nuevo testamento no viene. Porque, si mal no recuerdo, una vez que Zuperzar resucita al muerto, no le habla de hipotecas. Entiendo que en esa época no existían hipotecas y que tu quieras darle una versión modernizada, pero…
-¡Cállate!
-No puedo, Pepe. Hablo hasta estando dormida.
-Lola vete ahora mismo a pagar la cuota.
-¿Ahora? ¿A las tres de la mañana?
-La una cuarenta y tres, Lola.
-Minuto arriba, minuto abajo, no cambia. Los bancos por mucha crisis que haya, que la hay, a estas horas duermen religiosamente.
-Que vayas, te he dicho, Lola.
-De momento a donde voy es al baño.
-Lola eres una morosa, no has pagado.
-He pagado, aunque no te quepa en esa cabeza cuadrada, yo he pagado.
-Que no, Lola, no has pagado.
-Que sí, leñe.
-Métete en Internet y lo ves. Eres una morosa. Me voy a dormir.
… Anda, zúmbale el bolo. Él a dormir y yo a sumar… ¡Maldita sea mi estampa! Una ya no puede ser ni honrada, ¿para qué, si nadie me cree? No me creo ni yo que haya pagado, pero el caso que me suena que me falta dinero y si me falta es que me lo he gastado, ¿pero en qué? Sumemos, Lola, sumemos… una más una son dos. Dos más tres son siete. Siete más siete son catorce. Catorce más catorce… aquí hay mucho número. Fracciónalo, no te vayas a confundir, es mucho número para tu cabeza. No te engañes, tu cabeza es ovalada tirando a plana y la de Pepe es gorda, cuadrada, muy cuadrada, Lola. No te mortifiques y suma… Uno más uno son treinta y tres y me llevo tres…
-Pepe, Pepe, Pepito…
-Hum…
-Pepeeeeeeeeeeeeeeee…
-¿Qué, qué pasa? ¿Se ha hundido ya? ¿Quién eres?
-Soy Maria Magdalena. Levántate. No hace falta que andes, sólo pídeme perdón.
-¿Qué no has hecho?
-No pagar, Pepe.
-Lola, déjame dormir.
-Que soy Maria Magdalena, leñe y de dormir nada. He pagado mi hipoteca dos veces Pepe.
-vale, hasta mañana, Lola.
-Que no te has enterado. Te digo que he pagado dos veces, la he repetido y me he quedado en descubierto, ¿ves? Por ser honrada al cuadrado… Y soy Maria Magdalena.

domingo, octubre 19, 2008

LOLA Y MARI PILI GEMELAS

-Fíjate, Lola, en esta noticia. Dice que para estar sanos hay que reírse al menos veintidós veces.
-¿Sanos, de qué, Mari Pili?
-De mente, Lola, de mente.
-¿Me estás llamando demente? No abrumes nuestra confianza con sinceridades de ese tipo, ¿me oyes?
-Lola, ¿por qué has de pensar lo que yo no digo? Cada vez más retorcida, leñe…
-A ver, ¿dónde pone eso?
-Aquí, en este artículo tan entretenido.
-¡Jesús, qué largo es! Hazme una hipnosis, Mari Pili.
-¿Hipnosis o sinopsis, Lola?
-¿Eh? Ya me estás comiendo el coco, Mari Pili, que te veo venir, ladina.
-Eres una cateta. Tanto leer sobres de sopa…
-… y el funcionamiento de los supositorios, Mari Pili, no se te olvide.
-Tres cuartos de lo mismo Lola. Eso no te amplia horizontes.
-¿Ah, no? Pues cuando me digas que no sabes ponerte un supositorio, no me vengas a preguntar.
-Lola, en la lectura encuentras un amplio bastión de conocimientos que hacen que tu mente…
-… Se colapse ante tanta información, Mari Pili. Poca, pero selecta. Más vale poco, pero rotundo y usable, que mucho y podrido.
-Ya, ya sé cómo dices, Lola. Con la lectura del posicionamiento del supositorio y con el sobre de sopa ya tienes suficiente, ¿no?
-Más o menos porque estoy estudiando ampliar mis conocimientos. No creas, sabes que siempre te hago caso, Mari Pili.
-¿Sí? Qué ilusión. ¿Y qué vas a hacer?
-He decidido leer, los sobres de flan el Chino.
-¡Ah!
-Sí, ya es hora de que aprenda a hacer flanes. Mis niños son muy exigentes y su madre les va a dar flanes inolvidables.
-¡Ah!
-¿Eso es lo que aprendes en tantos libros? ¿Sólo a decir ah?
-Es que tus razonamientos me dejan muda, Lola. No sé qué decirte más…
-Desde luego si no puedes superar tu silencio, cállate. Ya hablo yo por las dos.
-Vale, pero me preocupa que quien nos lea saque conclusiones erróneas.
-¿Erróneas? ¿De qué?
-Pues que piensen que Mari Pili es tan corta como Lola. Y yo soy muy larga.
-Sí, una lagarta, usurpadora de mi personalidad. Eso es lo que eres.
-Oye, mona, un poquito de por favor, que siempre me estás copiando. A ver quién usurpa a quién ¿eh?
-Una cosa es copiar y otra usurpar, guapa. Lo primero es admirar que es lo que yo hago contigo: admirarte.
-Y un cuerno, Lola. Me robas mi imagen. Como comprenderás, mira ese pantalón que llevas, que yo llevo, que es el mismo. Yo me lo compré primero. El culito que me hace es divino. Ahora, vuélvelo a mirar en ti, una lástima. Has deteriorado, en definitiva miiiiiiii imagen, miiiiiiiiiii personalidad.
-Y tú, has usurpado, del verbo usurpar que significa apoderarse de la dignidad, empleo u oficio de otro, es decir, de míiiiiiiiii personalidad, y usarla como si fuera tuya.
-Pero, ¿qué dices? Te estás volviendo una maniaca y, ¿sabes por qué?
-¿Por qué, usurpadora de personalidades rimbombantes?
-Pues porque no lees, Lola. Se te está quedando cara de sobre con ojos en forma de supositorio.
-¿De verdad, Mari Pili que tengo los ojos de supositorio?
-A ver, déjame que me ponga las gafas y te miro…
-Toma, están aquí… ¿Qué ves?
-Nada, la misma cara de chiflada de toda la vida.
-Ay, qué susto me habías dado Mari Pili. Venga, no se hable más. Zanjado nuestra diatriba. Ven, empecemos…
-¿A qué, Lola?
-A ampliarte la mente, coñe. La gente se tiene que reír de ti al menos veintidós veces al día… Repite: su po si to rio.

miércoles, octubre 15, 2008

MARI PILI Y EL CRUCERO DE LUJO

- Lola, Lola, ven, corre, siéntate, Ayyyyyyyyyy, qué envidia, Lola.
- A ver, qué pasa, Mari Pili. No te lleves esos sofocos, hija. Envejecen mucho y no estás para más arrugas.
- Es por mi amiga Carola. Se me ha subido la envidia a los ojos.
- A ver. Pues no, los sigues teniendo verde amatista. O, ¿es que es en la visión donde tienes ubicada la envidia? ¿Qué ves?
- Sólo envidia, veo envidia y nada más que envidia.
- Oye, ¿de qué color es?
- ¿Cuál, Lola?
- La envidia, Mari Pili.
- Roja, Lola.
- Ah, pues no, a mí ese color no me favorece.
- Si te cuento las vacaciones de mi amiga Carola, no te pones roja, Lola, te pones morada.
- Mira, ese color, me gusta, me favorece mucho, así que empieza a contar.
- Carola ha ido a un crucero.
- Anda, ¿y eso te da envidia? Nosotras de Somo a Santander hemos ido en trasatlántico.
- Sabrás tú lo que es un trasatlántico, Lola. A ti y a mí nos costaba ida y vuelta tres euros con noventa.
- Pues claro, porque sabemos viajar a un precio irresistible.
- A Carola la ha costado el crucero la paga extraordinaria… Entera, Lola.
- ¿Y te da envidia que se haya arruinado? En cambio nosotras…
- En la ruina y sin crucero, Lola.
- A ver, Mari Pili no me pongas de los nervios…
- Tengo valerianas, Lola, me sobraron del otro día cuando estuvimos con Aurorita. ¿Quieres?
- No quiero. ¿No has ido tú de vacaciones? Te va a castigar el niño Jesús por avariciosa.
- Sí, he ido de vacaciones, pero no como mi amiga Carola. Ella ha ido en un crucero de lujo.
- Te prohíbo que vuelvas a hablar con Carola, Mari Pili. Tú y yo sólo podemos ver el lujo del mercadillo.
- Pues yo quiero el lujo de mi amiga Carola.
- ¿Pero en qué consiste el lujo de tu Carola, leñe?
- Carola hacia pis y no necesitaba tirar de la cadena. Si eso no te parece lujo, Lola.
- Lo que me parece es que tu amiga Carola es una guarra.
- Que no, que no entiendes nada Lola. De verdad, te sacan del mercadillo y no tienes horizonte.
- Mari Pili, una persona que no tira de la cadena es una guarra, lo mires por donde lo mires.
- Lola, que era un crucero de lujo.
- Pues una guarra de lujo. El orden de los factores no altera el producto. Es una guarra envuelta de lujo y metida en una barca.
- Mi amiga Carola ha hecho un crucero, Lola.
- Si, de gran lujo. No sufras, mañana vamos al retiro y te monto en una barquita. Haces pis y tampoco tienes que tirar de la cadena
- ¡Qué guarrada! Pretendes que haga pis en el estanque.
- No, Mari Pili, en un orinal con patito amarillo que tengo guardado.

domingo, octubre 12, 2008

LOLA Y LA PILARICA

-De verdad, esto es una putada, Mari Pili. No es justo.
-¿Ya te estás quejando tan de mañana, Lola?
-Es que, a veces, no es honesto el destino conmigo. Para una vez que me decido, mira cómo me trata…
-¿Miro, qué, Lola?
-Pues la agujas, Mari Pili. De no coser, se han desintegrado. Para una vez que me decido, ya ves cómo me trata el destino. Fatal.
-Lola, en confianza, que quede entre nosotras, ¿cuánto hacía que no cosías?
-Mi memoria sólo almacena hechos recientes, es decir, mi cpu personal tiene para novecientos bits y cuatrocientos kilos de memoria. No más.
-¡Jesús, Lola! Parece como si estuvieras hablando de que tu cabeza fuera un ordenador.
-Más exactamente, un procesador de datos. Mi memoria RAM, no obstante, guarda de forma dinámica lo que me interesa y la costura no está en mis intereses y no te cuento si la electricidad se interrumpe, Mari Pili…
-Lola, ¿estás conectada a cables?
-Por su puesto, Mari Pili, se me gasta la batería y pierdo información si me desconecto.
-Ah…, qué interesante. Oye, ¿qué querías coser Lola RAM, como la leche?
-Pues es que hace siete años…, no, quizá ocho, me compré una bata de guatiné bonísima, ahora porque la ves descolorida…
-Me hago cargo, Lola, el tiempo no perdona ni a tu bata de guatiné. Sígueme contando…
-Pues eso, como era una bata de saldo, tenía taras…
-Claro, claro…
-Los agujeros para meter los botones estaban con demasiado agujero.
-¿Eh?
-Sí, mujer, el botón era más pequeño que el agujero. Entonces se escapaba de su lugar de origen y se iba.
-Ah… ¿A dónde se iba el agujero?
-El botón, Mari Pili, se iba el botón. Me daba lástima de ellos…
-¿Quiénes?
-Los botones. Fíjate eran doce, como los apóstoles. Mucho tomate para una sola Lola.
-Sí, sí, mucho tomate y, por eso, hasta ahora no te habías decidido, ¿no?
-Más o menos. En realidad quien me ha obligado ponerme manos a la masa ha sido…
-¿Pepe y sus calcetines?
-¡Qué va! Paso de ellos. Ha sido la crisis quien me ha inducido a coser.
-¿La crisis?
-Con la crisis hace un frío que pela y me tengo que tapar Mari Pili. Ya no tengo edad.
-Te dejo… Me voy, ¡Adiós!
-¿Pero dónde vas, chica? Espera… Seguro, Lola, que la has dado envidia y va a medir su memoria RAM para pasármela por las narices que la suya es más grande que la mía. ¡Qué lagarta de amiga tengo!
…………………………………………………………………………………………..
-¿Pepe, Pepe, eres tú? Soy Mari Pili…
-¡Hola, Mari Pili! ¿Qué tal mi amigo Paquito?
-Bien, bien, tan coñazo como siempre, pero no te llamo para hablar de él, sino de Lola.
-¿Qué la pasa, qué ha hecho? ¿Dónde, cuándo, por qué?
-Calla, hombre, no te alteres. Te llamo para que vayas corriendo a casa.
-Lo sabía, lo sabia. Se ha trastornado del todo.
-Más o menos, Pepe, pero en esta ocasión te beneficia. Corre a casa.
-La encierro y cobro el seguro…
-Pepe, por dios, deja de delirar. Mucho mejor que el seguro.
-¿Sí?
-Está cosiendo. Corre, coge todos los calcetines rotos que esta vez te los cose. Se ha vuelto loca… Ah, de camino a casa, compra agujas. Del desuso, se la desintegraron.
-Voy, voy, éste es un gran día.
-Sí, si, es el día de la hispanidad.
-¡Felicidades Mari Pili!

sábado, octubre 04, 2008

LOLA QUIERE SER RICA


-Mari Pili, ¿qué hará la gente para ser rica?
-Heredar, Lola. Los tiempos que corren no permiten amasar.
-Yo no quiero amasar. En tal caso que me amasen… Mari Pili, ¿cuánta familia tienes?
-Mucha, Lola, mucha.
-¿Y algún amasador de fortunas?
-Ni uno, Lola, ni uno. Más pelados que una rata.
-A mí me da igual que sean ratas de cloaca, lo importante es que tengan masa.
-¿Y tú, Lola? ¿Familia con posibles?
-Ni familia, ni posibles. Eso sí, mi cuñada Pepa tiene muchas cuentas corrientes.
-¿Sí?
-Y mis hijos y mi Pepe… Mira, mañana voy a preguntar en el banco si a Pepe Perro puedo abrirle una cuenta corriente.
-¿Al perro, Lola?
-Sí, Mari Pili, al perro. Hay que estar preparados.
-¿Para qué?
-Por si la masa desconocida recae sobre nosotros, Mari Pili. Necesitaré muchas cuentas corrientes para ingresar toda la masa adyacente.
-No es por quitarte la esperanza, Lola, pero no creo en ese tipo de fortuna.
-Yo no creo en la fortuna ni tengo más esperanza que la Esperanza de Triana. Mi olfato me dice que la masa está cerca.
-¿De ti o de mí, Lola?
-De las dos. Tú y yo somos un uno.
-Entonces, compartiremos masa, ¿no?
-Tampoco exageres Mari Pili, ya sabes que yo soy muy agarrada. En mi caso compartiré mi alegría contigo, como siempre he hecho, y tú sabes que es cierto.
-Sí, claro que lo sé… Yo juego todos los días a la bonoloto,
-¡Àh! Muy bien, me lo dices ahora, a estas alturas de la vida. Te has querido hacer rica sin hacerme partícipe. A ti te espero…
-Lola, si tu propia tacañería no te deja gastar para seguir amasando.
-Ya, es verdad, pero si me hubieras dicho que te iba a tocar, yo hubiera hecho un esfuerzo… Y ya ves, ahora tú estás casi cerca y yo no he empezado.
-¿Cerca de qué, gilipollas? Me pones de los nervios, Lola. Tú si que tienes dinero, al menos todo lo que yo he gastado en juegos de azar. En cambio, ¿yo que tengo, eh, dímelo?
-Mira, Mari Pili, cuando te sale la vena erótico festiva del mal carácter eres insufrible. Que sepas que se te está contagiando el pesimismo de Aurorita y no estoy dispuesta a darte a ti, también, valerianas.
-¿Mal carácter yo? Tú, que pareces un pollo chamuscado.
-Mari Pili… ¿No hueles a quemado?
-Sí, Lola, cada vez huele más… Hagamos las paces. ¿Ves? Nos estamos achicharrando una a la otra por el maldito dinero. Cuando éramos pobres no discutíamos, sin embargo ahora…
-Mari Piiiiiiiiiiiiili, corre, que no somos nosotras, trae un trapo…
-¿Qué pasa, qué pasa?
-La masa de la empanada que se quema… ¡Qué nervios!
-Toma una valeriana, Lola… No servimos ni para amasar una empanada.

viernes, octubre 03, 2008

LOLA Y SHAKESPEARE

-¿Lola qué haces?
- ¿Cómo que qué hago? ¿No lo ves?
- Lo veo, lo veo, pero no lo entiendo.
- ¿Y tú te tienes por listo? ¡Qué decepción, Pepe!
- Lola céntrate, por favor y dime…
- Pepe céntrate tú, yo estoy insuperable. Es más, mejor que nunca.
- Eso es imposible, cada día estás más tarada.
- Pepe, lo cortés no quita lo valiente. Estaré tarada, pero insuperable.
- Lola cada vez juntas más anormalidades y lo que es peor, las haces a la vez.
- Porque soy única y puedo hacer mucho a la ve, o de seguido, depende el momento.
- Lola, al menos, hazlo por nuestros hijos…
- ¡Uy! Te pareces a Shakespeare, ser o no ser… Yo, sin duda, soy.
- Lola, ¿por qué lo haces? Dime, no lo entiendo, de verdad que no lo entiendo.
- ¿Qué no entiendes el qué, Pepe?
- ¿Por qué estás viendo dos televisiones a la vez y encima tienes dos radios puestas? Todo a pares.
- Pepe, William Shakespeare dijo “No temáis a la grandeza; algunos nacen grandes, algunos logran grandeza, a algunos la grandeza les es impuesta y a otros la grandeza les queda grande” Yo he nacido grande pa tó, Pepe.
- -Dime por qué lo haces…
- Ay, qué leñe, qué cotilla eres. Pepe, es muy sencillo. Mis dos telenovelas las ponen a la misma hora.
- Pero no te puedes enterar, Lola.
- ¿Cómo que no? La oreja derecha oye “Siempre tuya” y la oreja izquierda “Lavinia, la rancherita prodigiosa”
- Y las dos radios…
- El cuponazo, una, y la otra, los cuarenta principales. Claro que si me llama Mari Pili es cuando me hago un poco lío, ya no sé si es Lavinia la del cuponazo o Mari Pili que me canta una ranchera. ¿Me comprendes, Pepe?
- Mal, bueno, no te entiendo, pero es igual. Me voy… Por cierto Lola, ¿has visto a Peluche lo que estaba haciendo?
- Por curiosidad, Pepe, ¿hoy no te habrás levantado reencarnado del inspector Gachet? Qué mañana tienes, hijo.
- Lola, el niño se estaba depilando.
- ¿Y?
- ¿Desde cuándo un hombre se depila?
- Desde que dejó de ser el más peludo, el más hermoso, Pepe… Por cierto te dejo, voy a depilar, mientras terminan las telenovelas, a Pepe Perro. Tiene ya melenas.
- Pues ten cuidado no vaya a ser que depiles al cuponazo, ¡hasta luego!
-Ser o no sér... ésa es la cuestión... Bueno yo a lo mío. Prográmate Lola.

lunes, septiembre 29, 2008

LOLA T LA CRISIS

-Mari Pili… soy Lola.
-No dudaba que fueras tú. Sólo tú puede llamar a las tres de la mañana.
-¡Caaalla! Se va a despertar Paquito y me capa.
-¡Ojalá lo hiciera! ¿Qué quieres?
-Mari Pili cada día tienes peor carácter.
-¿Qué quieres?
-Ay, es verdad, se me había olvidado. Claro, me preocupas tanto, que me olvido de mí misma…
-¿Qué quieres?
-Te van a salir arrugas por ese pronto tan malo que tienes y luego me vendrás llorando y no te escucharé.
-Te llamaré a las cuatro de la mañana para llorarte… ¿Qué querías, por última vez?
-Mari Pili he tenido una pesadilla terrible.
-Enterrabas vivo a Pepe…
-Peor, Mari Pili…
-Pepe Perro era perro.
-Sabes que Pepe Perro es gay… No, algo peor.
-Tu madre te regalaba un loro que te hacía sombra…
-No, Mari Pili, deja de decir sandeces. He soñado que éramos pobres. ¡Fíjate!...
-Lola, no hace falta que lo sueñes. Lo somos
-¿De verdad? ¿Ha sido por la crisis? ¿Ya llegó la recesión?
-Lola siempre has sido pobre. A nosotros no nos afecta que la bolsa se desplome. No nos afecta nada de nada, nada.
-¡Jesús! Somos titánicas, somos dos toritas.
-Ni toritas ni titánicas, Lola. Simplemente pobres.
-Bueno, pues entonces me vuelvo a la cama tranquila… Oye, ¿entonces quién es, además de nosotras, pobre?
-Media España.
-¿Y la otra media?
-Medianamente pobre un cacho y, el otro cacho, inmensamente rica.
-A los inmensos, ¿no les afecta la recesión?
-Yo qué sé, Lola.
-Pues a ver de qué manera me puedo yo enterar porque a los inmensos como no les afecte, protesto.
-¿A quién?
-Escribo una carta de protesta.
-¿A quién, Lola?
-Pues no sé… Al Papa, al presidente de mi comunidad, ya veré… Algo se me ocurrirá.
-Vale, pues hala, hasta mañana.
-No, no, espera Mari Pili, tengo inquietudes.
-Dilas que se esperen hasta mañana.
-No me van a dejar dormir. Son muy tórridas.
-¿Inquietudes ardientes? Yo no te sirvo. Despierta a Pepe, ¡hasta mañana!
-Mari Pili tienes una mente calenturienta. Céntrate en ideas más elevadas. Por ejemplo la economía.
-¿A las tres de la mañana?
-Sí, una hora estupenda.
-¡Adiós, Lola!
-¿Mari Pili…? Me ha colgado… ¿Y ahora, a quién le cuento mis inquietudes?... Pepe Perro, ven vamos a dar un paseo y te cuento lo inmensamente pobres que somos. Pero, oye, fenomenal, no nos afecta la recesión ni nada de nada, me lo ha dicho Mari Pili y ya sabes que es una mujer muy curtida, no tanto como yo, ¿eh?... ¿Pepe Perro?... Se ha dormido… Lola si es que duermes hasta las moscas… Bueno pues me hablaré a mí misma, ¿no te parece, Lola?

martes, septiembre 23, 2008

LOLA VIAJERA

-Mari Pili…
-¿Quéeeee?
-Que sepas que me estás maltratando… Dime, parla, esputa por tu boca, ¿por qué la agresividad ha llegado a tu ánimo desanimado?
-Lola, Lola, lárgate de mi vista cien años.
-Yo por largarme, me largo, pero largarme para nada, me parece que no es la solución. ¿Cien años, dices?
-Doscientos, mejor.
-Dejémoslo en quince minutos y vuelvo. ¡Hasta luego!
-¿Dónde vas ahora? ¿A cagarla de nuevo?
-Qué bocaza tienes, Mari… No tardo, tranquila… La que quería que me fuera doscientos años…
-Que te estés quieta, leñe. No tengo más nervios para aguantar tus meteduras de pata Lola. Quieta ahí.
-Dime, señoritinga, ¿en qué he metido yo la pata?
-Lola, te ha visto el culo más de medio tren. ¿Qué te parece?
-Mujer, al principio me he puesto un poco nerviosa, no te lo voy a negar. De ahí que el pis se me saliera de la taza y aterrizara en el pantalón, pero cuando vi que no tenía remedio y que la gente pasaba, volvía, de nuevo pasaba, se reían, pues… pensé que estaba haciendo un bien a la humanidad… ¿No?
-Bien a la humanidad ver un culo como…
-Ano, ano grande, pomposo, firme, turgente, Mari.
-Dime Lola, ¿por qué no aprendes a cerrar las puertas?
-Hija, yo nunca había ido en un tren magnético, las puertas son como las de ábrete Sésamo. Me veían y se abrían… Y cuando me metí en el retrete ella solita se cerró. No es mi culpa que se abriera cuando el pis caía a chorritos. Te digo que estos trenes tienen vida propia, Mari.
-Me llamo Mari Pili, no Mari… ¿Y el paraguas? ¿Eh? Dime.
-¿Qué paraguas? En el retrete no tenía paraguas porque si lo llego a tener, ¿ves? Me lo hubiera puesto debajo del culo.
-¿Pero qué dices? Lola, Lola, estás tarada. Esto se lo cuento a Pepe. Se lo cuento como me llamo Mari Pili.
-No, no, no, por San Cucufato, no me hagas esta putada o no me vuelve a dejar salir de casa Pipi.
-Pero si es que te han puesto una denuncia Lola.
-¿A míiiiiiiiiiiiiiii? ¿Qué he hecho?
-Tirar el paraguas desde un primer piso e ir a parar a la calva de un camarero. ¿Qué, no lo recuerdas?
-Ojito, ojito, que yo no he sido. Fue el paraguas que se tiró en caída libre. Pero qué moooooooooorro tiene el Señor paraguas. ¿Y tú le has creído? Ten amigas para esto, cree antes a un paraguas que a mí…, qué decepción, Señor.
-¿Y el beso que te diste con el mulato?
-¡Ay qué abalorios, Mari Pili! Es que no voy a poder salir de casa contigo, ¿eh?
-Desde luego que no, contigo no vuelvo.
-El mulato nos hizo la foto y, en agradecimiento, le besé la mejilla. Más casto, imposible. Seguro que tú le hubieras dado un beso de tornillo porque tú has sido siempre muy abierta de piernas… Que lo sepas.
-¿Qué tiene qué ver el culo con las témporas, Lola?
-Eso digo yo, Mari… Nadie es perfecto.
------------------------------------------------------------------------------------….
-¡Pepe, Pe eeeeeeeeeeeeeeeeeeeepe! Pepe, Pepe, Pepe…
-Lola despierta que has tenido una pesadilla. Toma un poco de agua.
-Entonces, ¿ha sido un sueño?
-¿Cuál, Lola?
-Que me veían el culo en el tren?
-Verdadero.
-¿Y que escalabraba mi paraguas a un camarero?
-Verdadero.
-Mari Pili… Dime lo que ha sido falso, anda…
-Nada, Lola, nada.
-Pepe, Pe eeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeepe, ven a buscarme eeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee.

domingo, septiembre 21, 2008

LOLA Y SUS PROEZAS

-Mari Pili, soy Lola.
-Ya te he conocido. Buenos días…
-Acabo de hacer una proeza. Estoy asustada, una nunca se acaba de conocerse así misma.
-Eso es bueno, así no te aburres de ti misma.
-Voy a llamar a Pepe para contárselo, pero antes quería que lo supieras tú.
-Sí, sí, mucho mejor que pase tu proeza por mis oídos antes que por los de Pepe y te mande al cuerno.
-¡Claro! Luego dice que no hay diálogo entre nosotros y es que no le puedo contar nada porque se pone hecho una fiera o, directamente, no me hace caso.
-Ya sabes que los hombres son una especie especial.
-No sé, sólo me he tratado con Pepe y me tiene atemorizada.
-¿A ti atemorizada?
-Mujer, es un decir. Yo he tratado de conservarme siempre igual.
-Y tienes que estar orgullosa, Pepe no, pero tú sí. Ser tremenda sin ápice de cambio tiene su mérito, más, teniendo un marido como el tuyo.
-¿Qué le pasa a mi Pepe?
-Pues eso, yo muchas veces he pensado que vería este hombre en ti. Un ser inteligente…
-Sí, sí, muchísimo.
-Delicado…
-Puff…
-Educadísimo…
-Una barbaridad.
-Un sabelotodo…
-Hasta el aburrimiento. Fíjate, yo muchas veces he pensado que en vez de estar en la funeraria, debía ser una pieza de biblioteca. Imagínate…
-Imagino…
-Le ponen en una mesa y va un fulano con dudas, se sienta, le cuenta y él responde.
-Sí, sí, como un médico, pero en versión enciclopedia.
-Eso, eso.
-… Lo triste es que su sabiduría, Lola, no te haya ni rozado el forro de la enagua.
-Lo mío es otro tipo de sabiduría… La de la calle, la supervivencia, la vida misma. Ésa no viene en los libros, como la de mi proeza de hoy.
-Ay, es verdad, cuéntame…
-Pues hija, voy yo, me levanto, voy al baño, me lavo, me doy los dos kilos de Nivea para las arrugas. Hago el café…
-¿Dónde está la proeza Lola? Eso lo hacemos todo el mundo.
-¡Calla y déjame contarte!... El café lo hago muy cargado, a Pepe le gusta así. Mientras se hace el café, saco las naranjas. Claro, que si abro el frigorífico y lo veo desordenado, lo coloco. Me gusta el orden y…
-Lola, ¿no puedes ir al grano?
-Ya voy, déjame que te cuente los antecedentes para que sepas lo equilibrada que me levanto… Tomo dos naranjas, ni una ni tres. Dos. Hago el zumo manualmente, así no gasto electricidad. Es importantísimo con la crisis, ahorrar, ¿no crees Mari Pili?
-Sí, sí. ¿La proeza para cuándo?
-Hija, me estás acelerando… Si hago mucho café, como la cafetera es vieja y no pienso comprar otra porque funciona muy bien, lenta pero estupenda, pues aprovecho para ir fregando. Ordeno por elementos, primero los vasoso…
-Lola, me tengo que ir…
-Ay espera que te resumo… Salgo al jardín, cojo la manguera, me pongo a regar en un agujero.
-¿Y para que riegas en un agujero?
-Mujer, pensé que si metía por allí el agua, se distribuiría después por todo el subsuelo.
-¡Ah! ¿Y?
-Asomó la cabeza por el agujero. Le miré, me miró, comprimí la respiración, mis dedos se agarrotaron…
-Pero ¿quién?
-Un ratón.
-Ayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy….
-Mari Pili, hija, no me seas histérica. Tienes que aprender de mí.
-¿Qué hiciste?
-Una vez tomada conciencia de la situación tan peligrosa en la que me hallaba, sin chillar ni nada, me puse a correr hasta llegar a casa, cerré todo a cal y canto y te llamé.
-¡Que woman tremenda eres, Lola!
-Sí.

jueves, septiembre 18, 2008

LOLA EN LA COMUNIDAD DE VECINOS

-¡Buenos días Lola! Quería hablar contigo…
-¡Buenos días Doña Eustaquia! Yo con usted no quiero hablar.
-Pues me vas a oír. La presidencia de este año es un desastre.
-¿Qué me dice?
-Sí y tú no te hagas la tonta porque eres miembra de ella.
-Doña Eustaquia no se confunda, miembra no soy, sólo cooperante eventual.
-No funciona nada y mis niños se puede coger cualquier cosa bañándose en esa piscina tan sucia.
-Ay, no por Dios… Llévelos al río.
-¿Y por qué los voy a llevar a l río teniendo una piscina?
-Porque usted dice que se van a poner enfermos sin se bañan en la piscina.
-¡Un desastre! Se están gastando nuestro dinero en memeces.
-Un poquito de por favor, Doña Eustaquia, yo solo toco mi dinero, que por cierto no tengo, así que tampoco lo toco. De todas formas, ¿ha pensado que esta presidencia está actuando como la gubernamental española? Porque si es así, estaremos en crisis rápidamente.
-Ya lo estamos, Lola.
-¡Qué lástima!... Bueno me voy, que tengo las patatas al fuego.
-Tú no te vas. Las fiestas patronales han sido malísimas.
-Pero Doña Eustaquia, ¿cómo dice eso si hubo verbena, pastas, limonada y procesión?... ¿Vio al santo que guapo estaba? Lo adorné yo con flores de su jardín.
-¿De qué jardín?
-Del suyo, Doña Eustaquia. Entré, llamé, como no me contestó, corté las rosas y se las puse al santo. Eso sí, le dije “Oye Santo, estas flores son de la pelma de Doña Eustaquia”
-Todos los años se compran las flores en una floristería…
-Ya pero como en éste estamos en crisis, ya sabe, ahorro de costes.
-No hubo entretenimientos para los niños…
-¡Ah! Yo pensaba que eso corría a cuenta de los padres. Yo entretuve a los míos, ¿usted no?
- Sus hijos son unos borricos. Una juventud que no hace nada.
-¿Los de quién?
- Los tuyos, Lola.
-No, no, se parecen a su padre. Me lo dijo la Cacharros y por lo tanto si se parecen a su padre, son un dechado de virtudes, oiga. Por cierto, ayer vi a su hijo meando en los setos. ¿No les funciona el cuarto de baño?
-¿Mi hijo? Imposible.
-Posible, vamos, segurísimo. Y su niña el otro día estaba tirando hojas secas a la piscina.
-¿Mi hija? Ni hablar, una niña tan dulce, tan…
-… Putón verbenero, Señora. La gustan demasiado los pantalones, debería estar al loro de lo que hace su niña… Bueno, me largo. Y si quiere reclamar, reclame al presidente del gobierno y al de su comunidad. Ambos son muy dialogantes. Ambos dcen que siempre están al lado del desfavorecido.
-¡Lola! Insisto en que tú eres miembra y por lo tanto…
-… Cooperante, Doña Eustaquia. Cooperante a tiempo parcial. Vamos, las que hacen lo que pueden cuando los otros no quieren. ¿me explico?
-Y, ¿tú no mandas?
-Yo, qué voy a mandar, Doña Eustaquia. Si mandara ya me habría puesto árboles en mi calle, farolas nuevas, antena parabólica, asfaltado todo el suelo, camión de la basura todos los días… Todo esto en mi calle, insisto, que es lo que hace la gente cuando manda, favorecerse.
-Ay, al año que viene me presento… ¡Qué buena idea, Lola!
-Hace usted muy bien.

lunes, septiembre 15, 2008

LOLA Y SUS AMIGAS

-Jamás te lo perdonaré, Lola. Ésta me la pagas.
-¿Cuál Aurorita? Tú sabes que yo sé, que todos sabemos que soy casi una santa.
-¿Santa túuuu? No me hagas reír. Yo siempre siendo la primera ya hora mira…
-¿Qué miro, Aurorita? Creo que el sol te está afectando a las meninges…
-No te lo perdono, Lola, ni aunque andes de rodillas todo el paseo de la Castellana.
-¡Jesús, qué dolor! No me perdones, pero ponme otra purga. No sé, que me coma dos docenas de pasteles, que escuche durante dos horas seguidas a mi Pepe, pero de rodillas no, tengo los huesos fatal.
-¿Tú los huesos fatal? Estás mejor que todos nosotros juntos.
-Ay, muchas gracias. Te advierto que ya lo sabía, pero mi humildad no me permitía decíroslo. Ahora, una vez reconocido públicamente, sí, estoy cañón.
-Mírala, encima haciendo ostentación. No te lo perdono, Lola.
-¡Mari Piiiiiiiiiili! Ven que ésta se está pinchando con el sol.
-¿El sol pincha, Lola?
-No, Mari Pili, quema, y a Aurorita el sol le ha quemado todas las ideas sanas que tenía. ¿Trajiste valerianas?
-De vacaciones no se necesitan, Lola.
-Aurorita en todo momento. Vete a la farmacia y compra un par de kilos.
- Has mancillado mi honra, mi orgullo, Lola.
-¡Toma ya! Soy la mancha cerebros. A ver, ¿me quieres decir de una puñetera vez, qué he hecho, Aurorita?... Mari Pili, ¿acabaste la carrera de derecho?
-Me falta el Derecho Romano, ¿por?
-Ya te vale, veinticinco años para aprobar una asignatura… Pues es que como Aurorita siga acusándome o sacas el Kalia para limpiarme o eres mi abogada defensora.
-Mari Pili no la defiendas, me ha postergado.
-Mari Pili, vete a por las valerianas y de paso compra lejía para limpiar a la niña.
-Déjame a mí que hable con ella, Lola, sabes que tengo más glamour que tú.
-Será tacto…
-Glamour, que llevo ropa de firma.
-¡Ah!... Aurorita ven que Mari Pili te va a firmar.
-No, que la has contaminado.
-¡Ay qué leche de bollitos! ¿Aurorita qué te he hecho?
-Sí, dinos que te ha hecho esta bruja.
-Mari Pili, ¿ese es el glamour de firma que pones? Yo no te he llamado bruja sabiendo que eres una garrapata, guapa.
-¿Garrapata, dices? Te habrás mirado tú que vas como un esperpento vestida como si tuvieras veinte años.
-Es que los tengo, Mari Pili, veinte años cerebrales.
-¡Ahí, ahí, me duele!
-¿Dónde, dónde?
-Yo he visto toooooooooda la vida y Lola tuerta, dándose contra las esquinas.
-Tuerta, no, maja. No veía de lejos… Bueno, ni de cerca, pero tuerta no.
-¿Y ahora, qué?
-Pues veo, sí veo ¿qué pasa?
-¿Veis? Ve y yo no. ¡Guarra, más que guarra!
-¡Toma ya! Soy una guarra porque veo. Si cada vez soy más joven, un poquito de por favor, utilizar los sesos, y daros cuenta que vuelvo a mi estado virginal.
-¿Ya no te acuestas con Pepe, Lola?
-Todas las noches, Mari Pili.
-¿Y no hacéis nada ya?
-Sí, dormimos y más cosas, claro.
-Entonces no puedes ser virgen.
-Mari Pili, voy camino de ello. Al estar sufriendo una regresión a la juventud pues…
-¿Cuándo perdiste la virginidad?
-Y encima ve y es virgen, ¡la odio!
-Y hago milagros, no te fastidia, Aurorita… Mari Pili, dale las valerianas antes de que me suba a los altares. Pero date prisa, que en un altar me voy a aburrir.

martes, septiembre 09, 2008

LOLA Y MARI PILI DESCONTROLADAS

-Ammmmmmmmmmmmmmmmm… Ahora tú, Mari Pili
-¿Qué digo, Lola?
-Alllllllllllllllllllllllllllllllllllll… Venga, tú.
-Ay lerele, lereleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee… ¿Qué tal?
-Eso no es zen, Mari Pili.
-¿Ah, no?
-No. Fíjate Aimmmmmmmmmmmmmm. ¿Ves?
-Beeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee. ¿Mejor?
-Fatal, Mari Pili, fatal. Has hecho la oveja.
- Espera que lo intento de nuevo Trimmmmmmmmmmmmmmm... Mira, me ha salido tridimensional.
-Que no, Mari Pili, que no. Has de concentrarte en tu propio karma.
-¿En mi qué?
-Karma, hasta que te eleves. Así, Auuuuuuuuuuuuuuuuuuu…
- Sí, tienes razón, Lola. Te has elevado en tu propia estupidez hasta reencarnarte en un lobo.
-Mari Pili, esto es muy serio, si no lo sabemos hacer, no se lo podremos enseñar a Aurorita.
-¿Y para qué se lo vamos a enseñar? Ella es feliz en el pesimismo.
-Sí, pero un pesimismo controlado y lo suyo es un caballo salvaje.-
-Ayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy, como…
-Eso, eso, muy bien.
-Muy bien, ¿qué, Lola?
-Lo que acabas de hacer.
-Si lo que quería expresarte es que me gustaría ser un potro…, eso sí, salvaje.
-Pues reencárnate. Céntrate en la imagen del potro y dices pooooooooooooooooo…
-¡Arre, arre, caballito, arre, arre por el caminito oooooooooooooooooooooo!
-Mari Pili eso es una canción de Marisol. Defínete, Marisol o potro.
-Aurorita, ¿qué querrá ser, Lola?
-Espera, que la llamo… Aurora, soy Lola.
-Estoy fatal, me gustaría evadirme. Se me acaban de quemar las alcachofas.
-Mari Pili, quiere ser alcachofa evadida… Tranquila Aurorita, te vamos a arreglar la vida ¡hasta luego!... Vamos a ello, Mari Pili.
-¿Vamos a qué, Lola?
-A reencarnarnos en una evasión de alcachofas.
-Ah… ¿Y eso cómo se hace?
-Choooooooooooooooooooooooooooooo… Continúa tú.
-Faaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa… Do, re, mi, fa, sol, la sí, doooooooooooooooooooooo. ¡Alcachofa, cha, cha, chá!
-… Ahora me preguntarás qué opino, ¿no?
-No, no hace falta, lo sé… Espera que me seco las lágrimas.
-Sí, sécate, sécate. Me has hecho llorar.
-Sí, Lola, pero de risa.
-Beeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee… Guauuuuuuuuuuuuuuuuuu…
-Lola, ¿qué haces?
-Descontrolarme como tú, Mari Pili.

domingo, septiembre 07, 2008

LOLA RADIOFÓNICA

-¡Por la mandolina de Santa Críspula! ¿Está usted segura?
-Señora, ¿es usted Dolores García?
-Lola, soy Lola.
-Entonces, disculpe, me he equivocado.
-Qué va a equivocarse. No, no. Quieta ahí y no me cuelgue el teléfono. ¿Por qué llama a Dolores García?
-Onda doble punto radio desea hacer una entrevista a la escritora novel Dolores García.
-Lola, soy Lola.
-Entonces, no es usted… Disculpe.
-Quieta ahí, no me cuelgue. Al fin y al cabo, usted no paga la llamada, así que hablemos.
-Tengo mucho que hacer, Señora. Me encantaría perder el tiempo con usted, pero la emisora…
-Piérdalo, piérdalo, nunca habrá gastado el tiempo conmigo… Y dígame, ¿qué quieren preguntar a Dolores, Lolita, Lola?
-Estamos entrevistando a escritores noveles…
-¿Para qué? ¿Qué les dan?
-Queremos saber sus comienzos, qué les mueve a escribir, su proyección…
-¿Proyección?... Puede interesarme. ¿En qué cadena televisiva proyectarían?
-No he hablado de televisión, esto es una radio, Señora.
-Mejor, mejor. Me han dicho que la tele engorda y ya bastantes kilos tengo encima.
-Pero, ¿usted es Dolores García?
-Lola, soy Lola… ¿Y de dineros, cómo andamos?
-¿Dinero? ¿Qué dinero?
-Digo yo que pagarán por la entrevista. Todos los famosos en el momento que abren la boca, les pagan… Puedo hacer un precio.
-¿Precio?
-Sí, depende las barbaridades que queráis que diga Y si es con fotos, más, claro.
-Pero si es una radio, no hay imágenes.
-Mejor, así ahorro y no voy a la peluquería. Estamos en crisis.
-¿Usted escribe?
-¿Quién? ¿Yo?
-Sí, es un programa para escritores, Señora.
-Si hay que hacerlo, se hace. Yo, trabas, jamás me pongo.
-¿Usted es Dolores García?
-Anda, guapita, estás muy pesada. Lola, soy Lola.
-Yo quiero hablar con Dolores García.
-Mira, en mi faceta de mujer multiuso, puedo ser lo que quieras. Tengo personalidad para eso y mucho más… ¡Ah! ¿Puedo llevar a Mari Pili?
-¿Mari Pili? ¿Quién es Mari Pili? Yo quiero hablar con Dolores García
-¿Y tú trabajas en una radio? Eres muy repetitiva, no sé yo vuestros índices de audiencia. Ahora que con Mari Pili y conmigo sin duda se saldrán de las parrillas.
-¿Mari Pili es Dolores García? ¿Es el seudónimo de Dolores García?
-Mari Pili es Mari Pili, lo más grande, eso sí, tendréis que dejarla hablar de la Termomix. La chica tiene una fijación y no la voy a traumar.
-Si Mari Pili no es Dolores García, Señora, en este momento nos despedimos.
-Quieta ahí, tú no te vas y como me vuelvas a nombrar a Dolores García te monto el chocho, así que tú verás… Vamos al grano, ¿qué me pagas?
-¿Pagar? Nada. Damos a conocer a los escritores noveles.
-¿Nada de nada? ¿Ni siquiera un vale de descuento para el supermercado, una línea de cosméticos, una consumición gratis…?
-Nada de nada.
-¿Y para eso me llamas? ¿Y para eso me haces perder mi preciosísimo tiempo?
-Yo llamé preguntando por Dolores García, la escritora.
-Pues yo soy Lola y gratis no hago nada ¡Adiós!
… Abrase visto, se pensara esa radio que voy yo a hablar gratis… Lola, hablar, con lo que te gusta a ti hablar... ¿Qué has hecho, Lola?... ¿Qué voy a hacer? El gilipollas, como siempre.

sábado, septiembre 06, 2008

LOLA HABLA

-¿Mari Pili cuidas tu corazón? ¿Le sientes fuerte?
-Fortísimo, Lola. ¿Y el tuyo?
-Lo noto acelerado, como un caballo trotón.
-… Como su dueña.
-He ido al médico.
-¿Y?
-Me ha recomendado hablar.
-¿Más?
-Hasta el infinito. Con la gente, con los pollos, con las plantas, los perros, los periquitos…
-Lola…
-¿Qué Mari Pili?
-Tú eso ya lo haces. Es más, un día te vi hablar con una caja.
-¿Sabes si estaba vacía o llena?
-¿Eso qué tiene qué ver?
-Mucho. Si está llena, es que hablaba al lleno y si estaba vacía, esperaba el milagro.
-¿Qué milagro?
-Pues que se llenara… ¿Tú no crees en los milagros, Mari Pili?
-No, soy escéptica. Creo si veo y toco.
-Como San Jonás… ¡Qué lástima!
-Dirás San Pedro, Lola.
-Mira, todos los santos son más de lo mismo. Unos pringados… De hecho el otro día que en el momento que pepe Perro me sintió, se metió debajo de la cama, ¡un desconsiderado! Huye de mí como de la peste. Pues decidí bajar a confesarme. Un cura no se puede negar a escucharme, ¿no te parece?
-¡Pobrecillo! ¿Y se quedó quieto? ¿Segura que estaba dentro del confesionario? ¿No saldría por la puerta de atrás?
-Estuve una hora y media, más o menos, y le sentía respirar y me decía “Hija mía continua” ¿Cómo me voy a callar si me animaba?
-¡Pobrecillo! Lo que tienen que aguantar los curas…
-Es su profesión, Mari Pili, y bien entretenida, se saben las cuitas de todo e mundo… Yo porque no me admiten como mujer cura y casada, si no, ¡Menudo momio iba a encontrar la iglesia conmigo!
-Lo contarías todo, Lola ¿Y el secreto de confesión?
-Yo no diría quién me lo contó, pero contaría todo, todo. Comprende, es buenísimo para la salud mental y corporal el hablar.
-Dios te castigaría, Lola. Un cura no es cotilla. Escucha y calla.
-Pero yo no porque sería “una cura” y las miembras curas no las pueden obligar al silencio.
-Anda ésta, ¿y las monjas de clausura?
-¿Qué las pasa?
-No hablan, Lola.
-¡Qué horror! Ahora sé porqué no me metí a madre abadesa y me casé con epe. Al menos aunque no hay diálogo recíproco, él me deja expresarme.
-¿Sí? A mí Paquito no me deja.
-¿Ves? No te puede funcionar bien el corazón.
-¿Y qué hago?
-Vete a la pollería y ponte a hablar con los pollos muertos. Esos jamás te llevan la contraria.

miércoles, septiembre 03, 2008

LOLA EN ECONOMÍA DE GUERRA

-Pepe, ¿dónde has estado?
-En la compra, ¿o no lo ves?
-Pepe, Pepe, no me revoluciones los nervios y los instintos. ¿Qué te mandé comprar?
-Pasta y macarrones… Y aquí están. ¡Ah! Y zumo
-Pepe, tú que tienes la mente tan bien amueblada, ¿dime por qué la has desamueblado? Dime, querido, antes de que te asesine.
-El próximo día vas tú, Lola, ya que eres tan perfecta.
-Sabes que Dios cuando creo la perfecta imperfección, me hizo personalmente a mí, pero me dejó media neurona para andar al menos en zapatillas. Pero túuuuuuuu… Me dan ganas de poner una reclamación a mi suegra.
-¿Qué tiene que ver mi madre en este ajo?
-Precisamente, ¿por qué me traes siete kilos de cebollas cuando en casa hay ocho aún de la vez anterior que tampoco te encargué cebollas y tú trajiste?
-Lola estaban de oferta… Acuérdate, economía de guerra.
-Ni el peor ministro del Señor Zapatero, que son todos, hace esto. ¿Y mi crisis?
-¿Estás en crisis?
-España entera está en crisis, Pepe. Hay que ahorrar, lo ha dicho el presidente, y vas tú y ¡hala! Treinta paquetes de pasta fresca, que justamente pasado mañana caducan ¿Tú crees que nos dará tiempo en menos de cuarenta y ocho horas a tomarnos los treinta kilos?
-Invita a Mari Pili.
-Está de vacaciones.
-Pues llama a Monchita.
-Está enferma del último atracón que la invité a patatas que se me caducaban, ¿lo recuerdas?
-¿Y Pichu? ¿Aurorita, tal vez?
-Justamente a esas dos no quiero invitarlas. Son las perfectas amas de casa que saben lo que hacen en cada momento. No quiero que piensen que su amiga Lola es una desequilibrada.
-Si lo saben y sabes que son ambas dos muy caritativas con el prójimo circundante.
-Pepe no quiero perder a mis amigas, ¿vale? Ahora te vas y devuelves la sobredosis de compra.
-No. Vete tú, yo me voy a jugar al golf ¡Adiós!
-Pero que moooooooooorro tiene este tío. Que se ha ido, que me ha dejado… ¿Monchita? Soy Lola.
-Lola, ¿no me llamarás para merendar, verdad?
-No, no, sé que aún tienes pesadez de estómago… Te llamaba ya que escuchas tanto la radio para ver si has oído algún remedio para la sobredosis de alimentos a punto de caducar.
-¿Qué, te la ha jugado de nuevo Pepe? No escarmientas. No tomas conciencia de que nuestros maridos están con la pitopausia y tienen descontroladas las neuronas. Además de pesados, están al límite de sus posibilidades.
-Pobrecillos, necesitan comprensión, Monchita.
-Más que compresión, paciencia y cerrar los ojos.
-Yo con que me quite las gafas tengo suficiente, ya no veo, pero siento, Monchita. ¿Qué hago con los sentimientos?
-Mente fría, controlada, Lola.
-Ya, ya sé cómo dices, ¿pero qué hago con mis veintisiete kilos de pasta fresca que caducan pasado mañana? ¿Tienes algún remedio de ultimísima hora, guapa?
-Sí, claro. Calcula cuánta pasta podéis comer por cabeza, el resto, dásela a los desfavorecidos. Ahora te dejo que he de preparar la comida. ¡Adiós, Lola!
-Oye… Me ha colgado… Las escribiré un email urgente.
Queridas amigas… Pichu, Aurorita, Mari Pili, Monchita… Ah, y vuestros maridos, hijos y familiares próximos también:
Sabiendo que estamos en crisis, sabiendo que estáis pasando hambre por el ahorro de costes que supone ahorrar en tiempos difíciles, vuestra Lola os convoca a una merienda, mañana mismo (pasado puede ser tarde, os podéis haber muerto de inanición)
Os esperan grandes sorpresas, con todo mi cariño, Lola.

¿Colará?

jueves, julio 24, 2008

CERRADO POR VACACIONES

Mari Pili cierra la maleta ya de una vez. Vamos a perder la dirección de la playa a donde no vamos a ir y a ver qué hacemos. Menos mal que con la crisis sólo necesitaremos el traje de esquimal y... Pepe, ¿has metido los palos de las escobas para que juegues al golf?
Voy a hacer recuento, no quiero que me falte de nada: la inspiración, las tonterías, las gotas para chiflados, mi jaula de grillos, Mari Pili, a ésta la voy a atar con soga porque cada día es más indómita. Hilo, aguja para no coser los calcetines de mi Pepe. La paellera de Paquito, las sardinas congeladas, la carilla de ahorro vacía.
He metido a mis lectores también en la maleta, a los mudos que no hablan, pero sé que pasan por aquí y piensan que soy gilipollas y a pesar de ello se ríen con mis desvaríos...
Bajo la trampa y digo:
MUCHÍSIMAS GRACIAS, CORASONES, EN SEPTIEMBRE AQUÍ ESTARÉ
¡Ah!, y unos consejillos dratuitos: sed felices, la vida es breve y reid, es la mejor terapia del mundo mundial.

viernes, julio 18, 2008

LOLA Y SUS DERECHOS

-Pepe, nos vamos a Teuralet.
-Lola, ¿dónde está eso?, ¿qué se nos ha perdido allí?
-Está en la sierra de Enguera; ni idea por dónde cae eso. Míralo en el mapa.
-Y, ¿por qué no Albacete que es más conocido?
-Mi sindicato me recomienda ir a Teurelet, y allá nos vamos. Pepe, es una oferta irresistible.
-¿Tu sindicato?, ¿qué sindicato?
-Comisiones Obreras, Pepe.
-¿Qué haces tú metida allí?, ¿saben quién eres, Lola?
-Mira, me acaban de mandar el carné.
-¡Santo cielo!, pero si tú no trabajas, ¿para qué demonios te afilias a un sindicato? Además, eres una ignorante. Acaso, ¿sabes a qué afiliación política pertenece Comisiones Obreras?
-¿Qué no trabajo, dices?, ¿Qué soy una ignorante?, ¿qué no sé que es de izquierdas y de los rojos, rojos? Ay, Pepe, qué cabestro eres, leñe.
-Lola, te pasas el día diciendo, cosa que no interesa a nadie, que eres de derechas y ahora, como todo lo que tú haces, te pasas a la izquierda.
-¡Ojo, ojo!, Pepe, mide lo que dices o trágate tus palabras. A mí ni San Cucufato me llama intolerante; hasta ahí podíamos llegar.
-Vale. Dime, ¿dónde trabajas, en qué empresa?
-De sol a sol en Garcias&Asociados. Vamos, en tu casa, Pepe.
-Esto no es un trabajo sino el bienestar de tu familia.
-Ya sé cómo dices: lavo tus calzoncillos y calcetines con suavizante para que tu culito piececitos estén como en una nube de algodón. Voy a la compra y me peleo con la Maruja de turno que se me quiere colar para que tu estómago se sienta rellenito. Plancho tus cami…
-Calla, Lola. Lo que tú haces no está reconocido socialmente, Lo siento, pero es así.
-¡Y un jamón! CCOO me acaba de enviar el decálogo del trabajador y, tristemente para tu bolsillo, te anuncio que o me pagas y me das las correspondientes vacaciones, o te demando. Tengo abogado, un gabinete enterito para mí sola… Ah, que no se te olvide darme de alta en la Seguridad Social. Imagínate que causo baja por enfermedad depresiva…Necesito psiquiatra y justificante de baja para que me sigas pagando. Imagínate, además, que te quieres deshacer de mí; no te vas a ir de rositas. O me pagas, me indemnizas y me readmites o te has buscado la ruina, Pepe. La ruina, querido esposo. Voy a llamar a Mari Pili para decírselo.
-Lola, estoy pensando…
-Piensa, piensa, pero te tengo cogido por lo que vulgarmente se llama “güevos”.
-Digo yo, mi querida Lola, que, ¿no sería mejor que te afiliaras a un partido más tranquilo, más acorde con tus convicciones? ¿Qué te parece afiliarte al Partido Popular?
-Ya lo he hecho, Pepe. Mira que carné más bonito. Lleva hasta una palomita buena onda. Por cierto, Pepe, mi partido me pide horas libres; tenemos que ir, de aquí a las elecciones, a veintitrés manifestaciones.
-¿Qué partido te pide eso?
-Los dos: el sindicato y el PP. Tengo que consultar con Mari Pili porque, claro, imagínate, Pepe, que a los dos les da por salir el mismo día, ¿qué hago?
-No ir, Lola. Así me coses los calcetines; ya huelen ahí puestos meses y meses.
-¿Son tuyos los calcetines, Pepe?
-Pues claro, Lola.
-Entonces, mi querido y estimadísimo Pepe, tienes dos opciones: lavar y coserte tú mismo mismamente, o hacerme un contrato. ¿Qué opinas?
-No opino; me voy a trabajar. ¿Me preparas el almuerzo?
-Sí, voy. ¿De qué lo quieres?, ¿de morcillas o cianuro?

martes, julio 15, 2008

LOLA LA LIANTA

-Creo Mari Pili que creceré en la vida sin traumas.
-Dirás disminuir porque ya tienes la edad ideal para descrecer.
-¡Cateta!, inventándote palabros como la ministra que no vienen en el diccionario… Y para que lo sepas, estoy en edad de ampliaciones, OPAS y OPV en mi cabeza.
-Te da igual veinte que ochenta. Mezclas sin rubor, Lola.
-Claro, porque las vergüenzas y los tabúes no se ha hecho para mí.
-Será eso, Lola.
-No lo dudes, Mari Pili… Y ahora vamos a lo nuestro. ¿Preparada?
-No. ¿Me puedes decir qué es lo nuestro?
-La hora de la batuka… ¡Bumbum, batuuuuuuuuuuuka!... Mari Pili, hija, qué sosa eres.
-¡Anda ésta! Tú no te has visto.
-Sí, guapa, claro que me veo y soy un espantapájaros apasionado. ¿Y tú qué pones? Dime.
-No pongo nada, Lola, soy limitada. Soy… nada.
-¿Cómo que tú eres nada? Eres mi amiga.
-Lo que es lo mismo que decir nada.
-Mari Pili, me huelo que estás depresiva y ese estado es el único que nos está prohibido. Recuerda que somos almas gaseosas.
-Pues seré gaseosa, pero sin fuerza.
-¿Qué te pasa, prenda, flor chuchurrida? Cuéntaselo a Lola.
-No, no te cuento nada porque luego lo cacareas todo.
-¿Me estás llamando bocazas, cotilla, chismosa?
-Sí, Lola. No sirves para tener la boca cerrada.
-Cierto, pero es que necesito que mis pulmones se oxigenen y este aire penetre en mis sesos, por eso no dejo de piar.
-Ya, pero es que luego tu lengua sale a pasear y escupe todo lo que hay almacenado en el cerebro y que sepas que allí hay cosas mías que no deseo que sean escupidas.
-Pero que egoi iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiista eres. ¿Te has parado a pensar que nuestras cosillas bien aireadas, como sólo lo sé hacer yo, pueden ayudar a otras personas que están desalentadas y necesitan una sonrisa?
-Pues no quiero que nadie se ría.
-Mari Pili tú estás deprimida; necesitas rápidamente un vigorizante. Voy a preparártelo.
-Gracias, Lola. ¿Es una tisana, una tila?
-Parecido… Toma, bébelo rápido o sus esencias se evaporan.
-¿Qué es?
-Infusión de penes de tortuga mareada.
-¿Eh? ¿De dónde has sacado eso, Lola?... Además será penes de tortugos, ¿no?
-Tortuga, bruta. Me lo ha recomendado Monchita que me ve si tono vital.
-¿Y te lo has tomado?
-No, estaba esperando la oportunidad. Si te hace efecto me lo tomo. Bebe…
-Ni de broma, prefiero la batuka.
-Batuka y los penes, venga, yo te acompaño.
-¿Monchita lo ha probado?
-Claro que no. Monchita es una mujer equilibrada, no necesita. Venga, a la de una, a la de dos y a la de…
-¡Para!... Voy a llamar a Monchita… ¿Monchita? Soy Mari Pili.
-¡Hola, guapa!... Mira me estaba preparando una infusión de tomillos de oca.
-¿Para qué es eso?
-No sé, me dijo Lola que son buenísimas. Ya sabes que me fío de lo que me dice Lola.
-Monchita, te tenía por más lista. ¿Y la infusión de penes de tortugo te las has tomado?
-¿De qué?
-De tortugos mareados o no sé qué.
-Ay, dame la receta, que la preparo.
-Espera, un momento… Lola ven aquí. Monchita no te ha dado ninguna receta de tortugos.
-De tortugas, Mari Pili. Entonces me lo habrá dicho la radio. Yo no me invento las cosas.
-Monchita, oye, déjalo, no te tomes nada hasta nueva orden. ¡Hasta luego!... Oye Lola eres una lianta. Llevas a todas las amigas por caminos tenebrosos.
-Dirás, discutibles. Pongo sal y pimienta a vuestras vidas.

miércoles, julio 09, 2008

LOLA Y EL DÍA DEL PADRE... EN JULIO

-Pepe, Feliz día del padre.
-Lola, no soy padre. Además, estamos en el mes de julio.
-¡Jesús!, no me asustes, Pepe. Puedo prometer y prometo que mis hijos son tuyos y de nadie más. Y encuanto al mes de Julio es un mes sinfónico como otro cualquiera.
-Imposible; son tuyos y tu madre, también. ¡Ah! Y el mes de julio, también.
-¿Mi madre, Pepe?, ¿cómo va a ser tu hija? Qué aberración… Lo que me faltaba a mí... Y el mes de julio, pensaba que era del calendario, pero si quieres ser su padre, por mí no hay problema.
-Lola, me voy a la funeraria; es tarde.
-Espera, espera. Tú hoy no te vas así como así. Peluuuuuuuuuuuche, Antiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, Calendariooooooooo, venid a felicitar a vuestro santo padre.
-Que no tengo hijos, no te empeñes.
-Mira, Pepe, tú ni nadie duda de mi castidad.
-Lola, ¿qué tiene que ver la castidad?
-Pues eso, Pepe. Yo toda la vida te he sido fiel y esos dos monstruos son tuyos. ¡Ah! Y el mes de Julio. Peluuuuuuuuuuuuuche, Antíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, venid a dar el regalito a vuestro papi.
-Lola, que no quiero nada, que me voy…
-Tú, tan austero como siempre… ¿De quién piensas que son esos dos monstruitos, mi querido Pepe?
-Míos, imposible.
-No, si ahora van a ser del Espíritu Santo, no te joroba, y yo virgen y casta.
-No, Lola; tú, cabra simplemente.
-Bueno, me da igual, pero las cabras paren igualmente, tienen cabritillas.
-Lola, Lola, deja las cabras que terminas enredándote en un jardín de cabras y diciendo barbaridades.
-Pepe, yo no he mencionado A las cabras, has sido tú.
-Vale… Me voy.
-Que no te vas, espera. Peluuuuuuuuuuuuuuuuche, Antiiiiiiiiiiiiiiiiii, que se va Padre a la funeraria, despedidle con alegría.
-Que no, que no son mis hijos, que no se merecen que yo sea su padre, Lola.
-Mira, Pepe, no me alteres. Acepto gallo como astronauta emblemático, pero los niños necesitan un padre y hoy es San José. Te tocó el gordo, Pepe.
-Buenos días, Papuchi. Toma…, que tengas buen día.
-Paaaaaaaaaadre, campeón, que la mala leche no te coma en un día tan especial.
-¿Ves, Lola? No pueden ser mis hijos.
-¿Cómo que no, Pepe? Si son calcaditos a ti.
-Lola, son tuyos.
-Nuestros, Pepe… Los chicos son el resultado de un negocio que comenzamos hace veintidós años… ¿Lo recuerdas?
-¿Qué si lo recuerdo, dices? Todos los días, hora a hora, golpe a golpe.
-Paaaaaaaaara… Tampoco se necesita tanta memoria histórica. Anda, abre los regalos.
-¿Para qué?
-Por el efecto sorpresa, Pepe. Emociónate, leñe, que me estás crispando y ya con ZiemPiés tengo bastante.
-Pero, Lola, mira esto…
-¿Qué?
-Unos calzoncillos rosas.
-Ay qué monos, Pepe. Discrepan de tu personalidad ceniza, pero alegrarán a tus pantalones.
¿Tú crees, Lola?
-Sí, hombre. Es una nota de color. Para ir a trabajar a una funeraria es lo que más te pega.
-¿Tú te crees que a todas horas me estoy bajando los pantalones, Lola?
-En la funeraria no sé, con tus hijos, a cada minuto Pepe.
-Ya…

viernes, julio 04, 2008

LOLA DE MADRUGADA

-Mari Pili… Soy Lola…
-¿Ya estamos otra vez, Lola?
-No te quiero molestar, sé que no es hora…
-No, mujer, sólo son las tres de la mañana. ¿Hoy qué, demonios, te pasa?
-Pasarme, lo que se dice pasarme, no me pasa nada. Simplemente necesito comunicarme, Mari Pili.
-¿Has tratado de conectarte con los extraterrestres, Lola? Me han dicho que están deseosos de intercambios.
-Es que seguro que no hablan mi idioma y, claro, no iban a entender lo que acabo de hacer.
-¿Qué has hecho?
-Un acto de amor, Mari Pili, pero muy, muy… muy acto.
-Ay, Lola, con lo estrecha que tú eres, cuéntame. Venga, habla, ¿has practicado las posturas del libro de López Ibor?
-Mari Pili pero, ¿en qué siglo te quedaste tú, maja? Si ese libro lo robamos de la estantería de Don Fulgencio, el profesor de latín, hace cuarenta años o así…
-Entonces, ¿has practicado Tantra?
-¿Eh? ¿Qué dices, chica…? A mí háblame en español o te cuelgo el teléfono… Vamos a ver, Mari: te estoy hablando de acto en mayúsculas; de amor elevado al cubo.
-Pues eso, Lola… ¿Lo has hecho vestida o desnuda? Yo es que me pongo velos…
-Yo en pijama… el de los ositos de colores, que es muy gordito y cerradito, pero el próximo día pruebo con los velos, quizá, así me anime un poco.
-Ay, Lola, qué seta eres y qué poco sexy… Y Pepe, ¿no te ha dicho nada?
-Estaba dormido…
-Ah… Y, ¿dónde lo has hecho?
-En la lavadora; he aprovechado que terminara de lavar.
-Y con el movimiento, ¿Pepe no se ha despertado?
-Nada, como un cesto.
-Pues vaya acto de amor en mayúsculas… Qué raros sois, Lola. Mira, yo he leído guiones del cine erótico, pero jamás una cosa así… Lola, ¿dónde ves tú ese acto tan grande y sublime?
-¿Me vas a decir tú, Mari Pili, que no es un acto de amor coser un botón de la gabardina de mi Pepe a la una de la mañana, aprovechando que mañana va a hacer un sol de justicia?
-Ah… Sí… Sí… ¿Cuántos orgasmos has tenido, Lola?
-Una hemorragia, Mari. He pasado de los espasmos al clímax. De la convulsión a la exaltación… Todo seguido y con el botón en mano.
-¡Qué grande eres, Lola!
-Ni que lo digas, Mari Pili… Buenas noches.
-Hasta mañana, Lola.

martes, julio 01, 2008

LOLA EN REBAJAS

- Mari Pili, Mari Pili… Mari Pili
- ¿Qué quieres?
- Ven, mira qué joyas.
- No puedo moverme, Lola, o se me caerá todo.
- Todo menos ponerte nerviosa porque tenemos que tomar altas decisiones y hemos de estar relajadas.
- ¿Relajada, dices? Pero si llevas volviéndome loca todo el día. Parecemos dos corre caminos de tienda en tienda y tiro porque me toca.
- ¡Ah!, quieres encontrar chollos y no mover el culo. Los milagros no existen, Mari…
- Ya, Lola, pero si me lo llegas a decir, tomo un reconstituyente. He perdido hasta un zapato… A ver como vuelvo a casa.
- Gallina, que eres una gallina. Mira cuánto zapato suelto hay ahí, coge uno y deja de quejarte.
- -¿Qué, y si al salir me pita la alarma?
- Pues nos echamos a correr, Mari Pili.
- Estás zumbadísima, Lola.
- A ver, ¿cómo no quieres que me trastorne yendo de compras? Es que me compraría todo, hasta lo que no venden.
- -Yo también, Lola… ¿No estaremos poseídas?
- …Sí, Mari, pero si hacemos estas reflexiones, llegará otra tarada como nosotras y se llevará estas joyas.
- Ah, de eso nada… Venga, Lola, decidamos.
- A ver… ¿Qué te parece este pantalón de cebra del Penedés? Qué precio, es irresistible.
- Sí, pero, ¿has visto qué agujero tiene en medio del culo, Lola?
- No problema, Mari: lo cosemos
- Lola no sabes coser.
- ¿Y qué tiene que ver con lo que estamos hablando?
- Si no sabes coser, ¿quién te lo va a coser?
- Lo llevo roto, Mari Pili… Pero mira qué monada, ¿cómo voy a dejar pasar esta ocasión?... Voy de frente y así no se ve el agujero. ¿A qué pienso mucho?
- -Como un libro abierto, Lola. Pero te convendría ir antes a unas clases de andar para atrás.
- No tengo tiempo… Venga, a ver qué llevas tú ahí…
- He cogido un vestido de pantera; es divino, pero dos tallas más que la mía.
- No importa; lo estrechas.
- No me gusta coser, Lola y tú, hoy, lo arreglas todo con la costura. Acuérdate como llevas a tu Pepe, parece el hombre roto.
- Las apariencias engañan; va con ventilación asistida para, si suda, el olor se evapore. ¿Entiendes, Mari Pili?
- No, pero es igual, Lola… ¿Qué hacemos?
- Saca la calculadora y sumemos.
- Vale… dime.
- Tres, más dos, más, uno, más cinco, más tres, más dos, más siete, más, quince…
- El de quince, quítalo.
- Vale; empecemos: tres más dos, más uno, más siete, más tres, más doce, más uno más…
- Quita el de doce.
- Vale; empecemos: tres más uno, más cinco, más, siete, más tres, más.
- Quita el de siete.
- Vale… Comencemos: uno más tres, más dos, más uno, más seis, mas dos, más…
- Quita el de seis, Lola.
- Vale… Comencemos: uno más dos, más tres más cuatro, más…
- Lola… Estoy pensando…
- ¿Qué, Mari Pili?
- Quita todo y quédate con lo de un euro.
- Vale… Ya está, Mari.
- ¿Qué nos queda?
- El pantalón de cebra con el agujero y el vestido de pantera, pero no el de dos tallas más que la tuya sino el otro.
- ¿Cuál, Lola?
- El que tiene el agujero en el seno izquierdo, Mari Pili.
- Vale, pues eso nos llevamos.
- Ya, pero hay un problema, Mari Pili…
- ¿Cuál, Lola, cuál?
- Pues cuando nos pongamos esto no podremos ir juntas.
- ¿Por qué esa bobada, ahora, Lola?
- Si yo camino al frente para que no se me vea la ventilación del culo y, tú, caminas de espaldas para que no se te vea el seno izquierdo… nunca nos encontraremos, Mari Pili… ¿Qué pena, no?
- Ay… No, No… Vamos, que no, ni hablar… Es que he dicho que no. No, no y no.
- ¿Qué es no, Lola?
- Vamos a ver, Mari Pili, ¿tú no entiendes el significado de no?
- Sí, pero en el contesto que tu lo ubicas, pues no.
- Qué no, ¿qué, Mari Pili? Te explicas fatal.
- Pues sí al no. Pero, claro, no sin más, pues como que no.
- Mari Pili, van a cerrar la tienda… ¿Sí o no?
- ¿Sí? Que no, Lola, aún falta… ¿Qué hacemos: sí o no?
- Pensemos: sí decimos sí, es que decidimos sí.
- Ya, y si decimos no, es que es un no definitivo.
- Sí.
- Entonces, ¿no, Mari Pili?
- No sé, yo no he dicho no, Lola.
- Claro porque has dicho sí.
- No, Lola, tampoco he dicho sí.
- Pero, Mari Pili, has dicho no al sí, entonces es un sí al no.
- Lola… Lola, calla y haz lo que te dé la gana… Te he perdido.
- Tranquila; decido por las dos y digo sí.
- ¿Sí, qué, Lola?
- Que… Mari Pili, Mari Pili, que nos han quitado la ropa…
- ¿Ves, Lola? Tanto sí y terminamos diciendo no.
- Mari Pili yo no he dicho no porque iba a decir sí pero…
- Hasta mañana, Lola.
- ¡Adiós, Mari Pili!, ¿quedamos mañana?
- Nooooooooooooooooooooooooo.

jueves, junio 26, 2008

LOLA Y SAN VALENTIN... EN JUNIO

-Pepe, soy tu Lola.
-¡Oh, Lola, qué sorpresa!... ¿Ahora qué, demonios, quieres?
-¿Estás muy ocupado?
-Me has llamado tres veces en menos de diez minutos y te he dicho lo mismo.
-¿Qué me has dicho? No tengo capacidad de almacenamiento; mi cabeza está a tope.
-Lola estoy trabajando…
-Ah, es verdad…, pero seré breve. Es que me acabo de acordar; lo han dicho en la radio.
-¿Qué han dicho?
-Que vaya al Corte Inglés.
-Lola, ¿qué te dije del Corte Inglés?
-Que ni se me ocurriera aparecer por allí, Pepe.
-¿Entonces?
-Es que como me lo tienes prohibido, se me ha ocurrido otra cosa.
-¿Qué, Lola?
-¿Estás preparado?
-Sí, dime, pero rápido que tengo tres ataúdes encargados y he de enviarlos.
-¿Para una misma familia? Qué desgracia morirse tres a la vez, pero te advierto que les lloras de una vez y ya est…
-Lo ooooooooola…
-¿Qué? Encima que me identifico con tu trabajo. Ahora, he de serte sincera, Pepe, tu trabajo es triste de narices. Eso sí, es tan cenizo como tu carácter.
-Lola me has llamado, ¿qué querías?
-Ah, es verdad. Fíjate lo han dicho Jiménez de los Santos, Carlos Herrero, el Gabilondo en la tele, Cesar Vidal… Todos, Pepe. Claro, he llamado a Mari Pili y ella ya lo sabía y yo no… Qué rabia he sentido que mi amiga sepa más que yo.
-¿Qué, Lola? O me lo dices o cuelgo el teléfono.
-Tranquilito, ¿eh? Yo tengo mu uuuuuuucha paciencia contigo y ya me ves: natural y fresca, sin aditamentos como las lechugas, querido Pepe.
-Lo siento, Lola, has podido conmigo. A la de una, a la de dos y, a la de t…
-¡Ámame, ámame mu uuuuuuuuuuuuucho, como si esta noche fuera la uuuuuuuuuuultima vez… Ámame, áaaaaaaaamame mucho que no tengo ganas de morirme conti iiiiiiiiiiiiigo!
-¿Qué haces, Lola? Me has dejado los tímpanos rotos. ¡Qué mal cantas, coño!
-Vamos a ver, Pepe, un poquito de por favor: me prohíbes ir al Corte Inglés porque te he quemado la tarjeta de tanto gastar. Al mercadillo tampoco me dejas porque allí sólo hay basura, ¿entonces, qué me queda? Regalarte una canción, Pepe.
-¿Pero por qué te empeñas en regalarme algo? El caso es gastar, Lola. No es mi cumpleaños, no es mi santo, no son reyes ni tampoco nuestro aniversario…
-Asno, que eres un asno…, que lo sepas.
-Encima insúltame.
-Fíjate, Pepe, hasta las ratas tienen más conciencia del día que es hoy.
-¿Qué día es, Lola?
-San Valentino, Pepe…, San Valentino, el de junio. Febrero está ya lejos..
-¡Coño, Lola!, es verdad, cariñito, perdóname. Que sepas que te quiero mucho… Luego te compro unas flores según pase por el Corte Inglés.
-Ni se te ocurra, ¿eh? Como entres en el Corte Inglés, te machaco tus atributos… ¿Vale?, ¿está clarito, Pepe? Ni para hacer pis te van a servir.
-¿Qué quieres, pues, que te regale?
-Nada, Pepe, nada… Que me respetes, leñe.

miércoles, junio 18, 2008

LOLA Y LA CELESTINA

-Oye Lola que llama Aurorita.
-¡Qué oportuna! ¿Qué quiere?
-Salir a dar un paseo.
-¿Esa chica esta loca o qué?
-¿Desde cuando dar un paseo es de locos, Lola?
-Pues desde que una se vuelve sensata y se pone productiva… Trae para acá el teléfono… ¿Aurorita qué te pasa?
-Llamaba por si queríais dar un paseo. Claro que no quiero molestar.
-¿Sabes lo que me pone enferma de ti?
-¿Cuál, Lola?
-Esa discreción y prudencia que te ennoblece, pero que a mí me mata. ¿No tienes que guisar unos pollos?
-¿Para que quiero yo guisar unos pollos, Lola?
-Pues para congelarlos, para llevártelos ala playa, yo qué sé… Aurorita, ¿Y limpiar la plata, lavar las cortinas, ordenar el trastero, planchar o aunque sea leer el Kamasutra?
-Estoy harta de ser mujer perfecta y el kamasutra no tengo con quién practicarlo.
-Pues da la casualidad que a mí me ha entrado la sensatez y me estoy convirtiendo, bueno, y Mari Pili también por el efecto del eco en mujeres de provecho, y vas tú y lo jorobas.
-¿Yo?
-Sí, tú. Siempre te hemos tenido en los altares como el eslabón perdido y difícil de imitar y cuando decidimos ser tu reflejo, tú decides ser otra cosa.
-¿Por qué quiera dar un paseo?
-Sí. Una cosa trae la otra. El que evita la provocación, elimina el daño.
-¡Ah! Bueno pues llamaré otro día. Me pondré a leer el kamasutra.
-Dime una cosa Aurorita, ¿para que vas a leer el kamasutra?
-Es lo que me has recomendado, quizá averigüe algo
-¿En el Kamasutra? ¿Tú? Lee mejor Platero y yo, va más a tu personalidad.
-¿Si, de verdad?
-Sí. Porque Juan Ramón Jiménez era un ser delicado, una florecilla como tú sin maldad ni malos pensamientos, aunque eso de que quieras ser vaga, me mosquea.
-¡Ah! Oye Lola, ¿te dedicas ahora a las artes adivinatorias?
-No. Mari Pili y yo estábamos haciendo un master justo hasta que nos has llamado tú.
-¿De qué?
-Somos las futuras “matchmaker” españolas.
-Di, por favor a Mari Pili que se ponga.
-Dime Aurorita.
-¿Se puede saber que estáis haciendo?
-¿Y esa pregunta no me la puedes hacer a mí, Aurorita?
-Lola deja el teléfono a Mari Pili
-Aurorita estamos hablando con el teléfono si manos.
-Vamos, como si estuviéramos haciendo una video conferencia, pero sin imagen. Más íntima.
-A ver, explicarme qué es eso de matchmaker.
-No hables Mari Pili, se lo explico yo a esta bruja… Para que lo sepas señorita “metete en todo” estamos estudiando para el mercado de hombres global. Un negocio que mueve millones de euros. Es decir a ti jamás de los jamases te podremos prestar nuestros servicios. Sólo para hombres.
-Lola hablas como si con este master estuviéramos estudiando para el negocio de la carne.
-En cierto modo es así Mari Pili.
-¡Ay! Mis amigas se meten a pilinguis. Ay…
-Te lo dije Mari Pili que no abrieras la boca. Esta chica es muy inteligente, pero limitada… Aurorita que este master no es causa de pecado mortal. Anda, tómate una valeriana.
-Piliguis, que sois dos pilinguis…
-¿Te acuerdas Aurorita cuando en el colegio leímos la Celestina? Pues ahora se llama asesoras de citas cronometradas, unas consultaras para buscar pareja a los singles. ¿Se me entiende, Aurorita?
-Aurorita, como si fuéramos madames.
-Mari Pili que te machaco, que no hables… Aurorita escúchame…
-No… Ay mis amigas se meten a madames y no cuentan conmigo…
-Anda, jódete con “Mis Valeriana”… Y parecía una beata… De verdad Mari Pili, no hago carrera de ti.

lunes, junio 16, 2008

LOLA DESEA SER VIRGEN... DE NUEVO

-Mari Pili, Mari Pili…
-¿Qué te pasa?
-¿Nos lo reconstruimos?
-¿El qué, Lola?
-El himen.
-¿El quéeeeeeeeeeee, Lola?
-El himen, Mari Pili, para dar una sorpresa a Paquito y a Pepe.
-¿Qué sorpresa, animal de bellota?
-Pues que nos vuelven a estrenar.
-Mira Lola, te aguanto mucho, pero esto sobrepasa los límites. ¿De dónde te has sacado la idea?
-De la radio. Mi cabeza no da de sí para ideas tan extravagantes.
-Ni que lo digas, me habías preocupado.
-¿Qué, lo hacemos entonces?
-Yo, no, gracias. Me sienta bien no tener ese chisme.
-Pues yo sí. Voy a llamar a la radio a que me den el teléfono del reconstructor.
-Más bien dirás el arquitecto, Lola.
-… Tienes mala sombra Mari Pili, así estás de arrugada, por la envidia que tienes de que yo vuelva a la juventud en su plena dimensión.
-Debe ser eso…
-¿Me acompañarás?
-¿A dónde, Lola?
-Hija, ¿pues a dónde va a ser? Al reconstructor que reconstruya…, buen reconstructor será.
-Sí, tú haz trabalenguas, pero no se te ocurra llamar a la radio.
-Pero, ¿por qué no?
-…Es para denunciar a esos programas… No se dan cuenta que hay insensatos como tú que los escuchan y les siguen. Igual que las sectas.
-No, Mari Pili, yo quiero volver a tener mi himen, no meterme en una secta. ¿Tú, sí?
-¿Yo, qué, Lola?
-Eso, que te quieres meter en una secta… Si quieres miro en Internet qué sectas son las mejores.
-¿Ves? Otra cosa igual. No debían dejar meterse en Internet a cualquiera y menos, seres como tú.
-Tranquila, no hace falta. Mira, en las páginas de anuncios vienen unas cuentas sectas. ¿Cuál quieres, la secta Luciferina, la secta satánica o la de los adoradores de Seth? ¿A cuál te afilias?
-A ninguna, Lola, contigo tengo bastante.
-Ah, no, no me vengas haciendo la rosca ahora. Si no quieres ser virgen, métete en una secta. La Luciferina es la que más encaja con tu carácter pusilánime.
-¿Pusi qué?
-Pusilánime, adjetivo que quiere decir falto de ánimo y valor para soportar las desgracias, o hacer frente a grandes empresas como, por ejemplo, volver a ser virgen con himen recauchutado.
-Valor tengo mucho. Llevo cerca de cuarenta años aguantándote, siguiéndote…
-No te gastes, este es el momento.
-¿De qué, Lola?
-De seguirme y volver a nuestras raíces.
-¿Qué raíces?
-Las vírgenes
-Sí, y nos llamarán las vírgenes castellanas, no te fastidia…
-Pues si aborreces la virginidad, no hay otro sitio que la secta para ti… Mari Pili…
-¿Cómo que no hay sitio para mí a lo largo y ancho de este mundo, Lola?
-Vamos a ver, Mari Pili, ¿tú crees que yo he sido injustamente tratada, que busco el poder, las influencias, el dinero?
-Tú, no. Yo, por supuesto que sí.
-¡Ay, Jesús!
-¿Qué te pasa ahora, Lola?
-Que eres una Luciferina. Mira, mira, lee…, tienes todas las características… Oye lo que no sabía que eres de ultra derecha y racista… ¡Qué engañada, me has tenido!
-Lola, vamos, llama a la radio.
-¿Nos reconstruimos, entonces, Mari Pili, mejor que ser de una secta?
-Síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, y cállate ya.
- …”Somos vírgenes, mantenemos un cariño liiiiiiimpio y puro. Tutuá… “… Mari Pili, ¿Tú crees que Paquito y Pepe lo notarán?
-¿El qué, Lola?
-Nuestra metamorfosis… Es que yo voy, pero ir para nada, es una solemne tontería, ¿no?
-¡Señor, me has escuchado! Lola vuelve a su ser…

sábado, junio 14, 2008

-Mari Pili date prisa o se me acaban las alcachofas. La huelga camionera me está matando.
-¿Vas a comprar más alcachofas, Lola? ¿Haces colección? Si compraste ayer seis kilos y antes de ayer, doce.
-En la tele dicen que ya se ha terminado los productos frescos y que el presidente del gobierno no se va a bajar de la burra y los camioneros no se apean del caballo, dime tú que hacemos los miembros y miembras de este país. Mi Pepe necesita sus alcachofas para subsistir.
-¿Pepe sólo come alcachofas?
-Sí, casi. ¿Tú has mirado la piel y la barriga a mi Pepe, Mari Pili?
-No. No es mi tipo tu Pepe.
-Tampoco es mi tipo tu Paquito y le miro, guapa.
-Pues muy mal. ¿Con qué permiso miras a mi Paquito?
-¿Qué quieres, que le mire el culo, los pies…?
-Nada. Mi Paquito es mío.
-¿Eh? Oye, ¿estás celosa? Si tu Paquito no vale un pimiento…
-¡Lola! Los pimientos de Paquito, tenemos que encontrar pimientos… Y mi Paquito vale más que tu Pepe.
-Lo que tú digas. Ninguno de los dos vale un pepinillo… ¡Mari Pili! Los pepinillos de Pepe, ¿dónde encontraremos pepinillos?
-¿También come pepinillos? Qué dieta más aburrida.
-Un asco, pero qué cuerpazo se le está quedando… Ya quisiera tu Paquito.
-Lola, donde esté una buena morcilla, unos chorizos, que se quiten los pimientos, alcachofas y pepinillos.
-Sí, pero ellos eliminan toxinas y tú y ello, ¿qué quitamos?
-Nada, hija, que todo está muy caro, no es cuestión de tirar.
-Cada vez estamos más redondas.
-Piensa en positivo, los gorditos y gorditas tenemos un carácter maravilloso.
-¿Tú crees, Lola?
-Sin duda, Mari Pili. ¿Tú crees que si comiéramos sólo alcachofas, nada de menús súper calóricos íbamos a estar así?
-¿Y cómo estamos, Lola?
-Zumbadas, Mari Pili, como hay que estar para encarar este mundo en el que vivimos.
-¿Y qué le pasa al mundo?
-Hija, ¿no tienes ojos? Mira a nuestra amiga Aurorita, todo el día tomando valerianas, ¿y por qué? Porque vive en el mundo real. Y tú y yo, como dos grillos fuera de la jaula.
-Pues un poco de sensatez no nos vendría mal, Lola.
-Mira, Mari Pili, tú sabes que en pocas ocasiones he utilizado la cabeza y, ¿a dónde me ha llevado? A que me salieran almorranas, sofocos, a la agresividad conceptual, a…
-Lola, ¿qué es la agresividad conceptual?
-Todo lo que no entiendo que, por cierto, es el noventa y nueve por ciento de la cosas, y me pone fuera de mí. A ver, por ejemplo, con la cantidad de menopáusicas que hay, ¿crees normal que estén tirando la leche por las alcantarillas con el calcio que tiene? ¿Eh? Contesta.
-Pues…
-Deja, no contestes. Te pongo otro ejemplo, si hay tantos violadores, ¿por qué no les capan? Muerto el perro, se acabó la rabia.
-Pero qué burra eres, Lola.
-Ya, ya, burra, pero yo no quemo a un compañero porque quiera ejercer su libertad, ni pego a mi Pepe… ¿Ves? Me acabo de poner a pensar. Ahora mismo nos comemos unas alcachofas. Toma…
-Lola, están crudas.
-Da igual, come y calla que todo me tienes que discutir. Para eso ya tengo a Pepe.

LLUVIA DE PREMIOS

Hijos, tengo unos atrasos enormes. Recibir tanto premio me pone en gravitación varios días hasta que vuelvo a la tierra con los terrícolas y decido repartir la emoción que me han dado a mí. Blum, http://blumuneando.blogspot.com/ , que es la que siempre se acuerda de mí dice que estos pequeñitos / grandes premios son una manera sencilla y cariñosa de publicitarnos y es verdad. El abrir tu blog cada día y encontrar el reconocimiento, las lecturas, los comentarios de gente, te infla de alegría para seguir dando forma a tu imaginación.
En fin, menos rollo y voy al grano; por favor poneros en fila, no os amontonéis que no os veo.
El primer premio “Premio al esfuerzo personal” es para… tatatachán…
Cati Cobas http://www.caticobas.blogspot.com/ sus escritos nos acercan a un mundo que siendo real, es maravilloso sumergirse en él.
Lola Bertrand http://asturiasyyo.blogspot.com/ por hacer de un blog una maravillosa guía turística de su tierra, Asturias.
Marta http://super-mujer.blogspot.com/ porque su blog es el esfuerzo permanente para colocarnos una sonrisa.

Ahora vamos con el premio “Huellas”. Los galardonados a recoger este maravilloso premio por dejar siempre una huella cada vez que los leemos son:
Mi Nómada Planetario http://alfaguaraerrante.blogspot.com/
Diario de Letizia http://diarioprincesaletizia.blogspot.com/
Pier
¡Hala !, ya os podéis ir... Un besito para cada uno... Cerrad la puerta al salir.

jueves, junio 12, 2008

LOLA SEXÓLOGA

Últimamente he descubierto en la observación un pozo sin fondo… ¿Para qué me habré puesto las gafas, digo yo? Todo por hacer caso a Mari Pili en que me ponga las lentes para enterarme de algo, con lo bien que se halla una en la ignorancia. Ojos que no ven, corazón que no se estrella, pero en fin…

A Peluche le noté muy rarito el otro día y le pregunté y me contestó muy cariñoso “Mamá no te metas en problemas de hombres”… Como estaba muy cansada y no tenía ganas de discutir, pospuse la conversación para el día siguiente, no sé qué hubiera sido mejor. Os cuento…¡No me lo puedo ni de creer! No he salido aún de mi asombro, mi Peluche me pidió consejos sexuales ¡A mí, que soy su madre! Ya tenía que estar el chico apretado para recurrir a mí, ¿no os parece? Ya os conté hace tiempo que mi niño me dijo que él sería virgen hasta el matrimonio y claro, ahora mirando al horizonte lo debe ver tan lejano que ha pensado que ser virgen hasta vete tú a saber cuándo, es un lastre, más, cuando sus amigos le han dicho que ellos tienen ya una larguísima experiencia, cosa que entre nosotros, por los datos que me ha dado, dudo mucho, porque vamos a ver, que ellos se ejerciten siempre en el water de una discoteca además de incómodo, en mi época era en un SEAT Panda pero ahí nadie te interrumpía pero en un water de una discoteca donde caben más de mil personas y que están continuamente mocionando… ¿Vosotros de verdad pensáis que se puede? Para mí que no, pero no iba a llevar la contraria a mi niño y, menos a las siete de la mañana que es la hora en que se confiesa y a mí me dan taquicardias.
El chico se le notaba azarado, como no sabiendo entrar en el tema; primero me preguntó así sin venir a cuento “Buenos días mamá, ¿a qué edad perdiste tú la virginidad? Y ¿Papá?” El café se me fue por otro orificio para desembocar por las fosas nasales. ¡Qué mal trago en un amanecer lluvioso! Me froté la barbilla y contesté “Tu madre no tiene edad, lo sabes, así que en una parte de su acelerada vida, entre pecho y espalda, tu padre me sedujo” ¿Qué iba a decir, leches? “Ya, mamá ¿Pero no recuerdas si fue cuando fuiste joven, muy joven, vieja como ahora?” ¿Por qué me ataca llamándome vieja cuando mi juventud es eterna, digo yo? Un sudor frío a esas horas tempranas es malísimo, así que decidí mojarme el trasero e ir al grano “Peluche, hay un momento preciso, que nada tiene que ver con la edad corporal, bueno sí, un poco bastante. Nace una frecuencia sintonizada de cabeza con tus partes masculinas que hacen que se encienda la luz de alarma; unas veces se apaga el fuego atropelladamente, otras, la madurez cerebral contempla el momento idóneo para que tu sexo se desfogue en los brazos femeninos de manera consecuente y responsable”
¿Os habéis enterado de lo que quise decir? Peluche creo que no, su carita de ángel perdido era un interrogante como una casa de grande. Entonces, me di cuenta que era el momento de pasar a casos prácticos y puse el ejemplo de Pepe Perro… Os juro que es un trance complicado, una quiere ser moderna, dialogante, pero el pudor a tu intimidad te puede ¿A qué sí? Pepe Perro era un caso neutral, no se iba a ofender porque contara sus cosillas ¿No? Y hablé claro, directo y sin tapujos… Tampoco me entendió.
Os prometo que hablé en Español, el idioma de mi niño, pero él como que no, que no se enteraba de nada. Ya me puse acelerada y le dije “Hijo ¿Qué te pasa? ¿Quieres y no puedes porque te bloqueas? ¿Nadie se te pone a tiro? No te obsesiones, las cosas surgen cuando menos te lo esperas, eso sí, como no lo sabes, lleva siempre un preservativo, hay unos de oferta muy estupendos en el supermercado, luego te los compro... ¿Te los sabrás poner? Cuando vuelva de trabajar, nos metemos en el water y te pongo uno para que sepas ¿Vale?”
Va el tío y con cara aterrorizada, de espanto, me dice “No, Mamá, déjalo, no hace falta” y se va corriendo y me deja plantada... ¿Pero, habéis visto cosa igual?Me he quedado tan cortada, no sin habla, ¿eh?

Me he ido a despertar a Anticristo y, ¿sabéis cuál ha sido su saludo? “Madre, ¿cuándo se nota que uno es hombre?” Esto es mucho para Lola, ahora mismo voy con Pepe Perro a la funeraria a hablar con mi Pepe para que me eche un cable, no es justo dejarme a mi sola con el sexo de mis dos pimpollos mientras él está absorto con los muertos y la gorda, que venga un momentito al mundo de los vivos y delgados a ayudarme ¿A qué sí?

sábado, junio 07, 2008

LOLA Y LOS BOLSOS

-Mari Pili, ¿te has fijado qué bombazo es este bolso? ¿Nos lo compramos?
-Lola, llevamos siete bolsos… ¿Si los dejamos para otro día?
-¿Y si no volvemos? ¿Y si volvemos y no está, o si está lo han subido de precio, o está con una tara, o si está y no lo encontramos o…
-Para… Dénos dos, por favor.
-Mejor, tres,
-¿Tres, Lola? ¿Para qué queremos tres si somos dos?
-Para nuestros hijos. Alguno seguro que le gusta. Prevenir para currar, Mari Pili.
-Lola tú y yo sólo hemos procreado tíos. ¿Crees que van a querer salir con un bolso a la calle?
-Mi Peluche es metrosexual y cuando vea que el Dolce&Gabanna…
-Tu Peluche será lo que sea, pero no es un esperpento. Además, el bolso es más falso que Judas. ¿Tú crees que lo va a querer?
-No. Tienes razón. ¿Y mi madre?
-¿Tu madre con un bolso amarillo limón, noventa y dos años y vestida de luto toda la vida?
-Mujer, así contrasta y más vale cambiar tarde, pero cambiar.
-¿Con noventa y dos años? ¿Tú cambiarías, Lola?
-¿Yo? ¿Para qué voy a querer cambiar si he sido kiss toda mi vida?
-Pues para pasar a ser una friqui, Lola…
-Algo de friqui ya tengo.
-Pues pasar a ser una persona normal, Lola.
-Noooooooooo, eso jamás. No empecemos, Mari Pili.
-Bien, pues dejamos el bolso y nos vamos a casa y por el camino me cuentas qué vamos a hacer con dieciséis bolsos.
-Diecisiete, Mari Pili, nos llevamos el bolso.
-Yo no pago el bolso.
-Yo tampoco.
-¿Entonces?
-No te enteras: nos lo ha regalado.
-Lo has robado, Lola.
-¿Yoooooooooo? ¿Qué quieres, que venga todos los gitanos del mercadillo con las navajas a hacerme picadillo?
-Aquí no regalan nada.
-Pero, ¿cómo no regalan nada si somos las mejores clientas? Lo que temen es que les hagamos la competencia, por eso nos tratan bien… Mari Pili para.
-¿Qué pasa ahora, Lola?
-¿Y si los vendemos?
-¿Vender qué?
-Los bolsos, hija, ¿qué va a ser?
-¿Con el desgaste emocional que nos ha supuesto decidirnos por ocho modelos? No, hija, no.
-Vale, pero se nos daría muy bien… ¿Y si vendemos los usados?
-Lola has de pagar por tener un tenderete aquí o viene la policía.
-No metas a la guardia civil en el negocio que no da para tanto. Lo tengo muy pensado.
-Lola no te ha dado tiempo a pensar. Es más, nunca lo haces.
-Pero esta vez sí. He sido ágil. El olor al dinero me ha inspirado.
-¿Si?
-¿Ves aquel portal? Aprovechando el marketing de los gitanos, tú te quedas dentro del portal con la mercancía y yo, cuando venga la riada de gente, voy anunciándonos.
-¿Y qué vas a decir, insensata de la vida?
-Pues lo que dicen todos “Barato, barato”
-Muy original, Lola. ¿Y ya está?
-No, no. La traca final para que sepan de que va mi mercancía es que me saco de mis súper pechos un trozo de bolso y luego lo vuelvo a esconder. Como los ilusionistas.
-Igualito…